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La Jornada Morelos ha dado voz desde hace más de un año a quienes han denunciado hechos de presunta corrupción en la administración de Cuauhtémoc Blanco. Muchas de esas denuncias se hicieron en torno a presuntas irregularidades cometidas en el Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos.

A su director, Eliacín Salgado de la Paz, maestros, trabajadores administrativos, padres de familia, ciudadanos y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, lo han acusado de tolerar, promover y cometer actos de faltan a la ética de los servidores públicos y a las normas que rigen al servicio profesional docente, y la conducta que deben observar los funcionarios. Todas esas denuncias y las afectaciones que produjeron al servicio educativo, al magisterio y hasta a la ciudadanía, incluidas por ejemplo el despido de una trabajadora enferma y el negar el servicio educativo a una persona con discapacidad, han sido cuidadosamente narradas por La Jornada Morelos. De las publicaciones, ninguna mereció la respuesta del director del IEBEM salvo la más reciente, este 20 de septiembre, a 10 días de que tenga que dejar su despacho.

La primera respuesta de Eliacín como director del IEBEM seguramente será la última y, aunque pretende aclarar, no la nota de La Jornada Morelos, sino las denuncias de propietarios de escuelas particulares y funcionarios del instituto que nos informaron sobre el cobro que consideraban indebido o adelantado, lo cierto es que las documentales que adjunta conceden razón en los hechos que los interesados denunciaron, según evidencian las fechas de elaboración y recepción de los oficios y hasta el contenido de los mismos.

Eliacín Salgado dejará el IEBEM pronto, pero como pintan las cosas no habrá vivido las últimas denuncias, la revisión de dos meses a que está obligada la administración del nuevo director, Leandro Vique, podría encontrar la documentación que compruebe las denuncias de trabajadores y ciudadanos respecto a las malas prácticas del IEBEM, La Jornada Morelos estará pendiente de narrarlas porque es parte de nuestra función como periodistas; igual lo haremos con todos los casos en que detectemos se pervierta la función pública, mucho más cuando se trate de asuntos que dañan a la ciudadanía, a la niñez, a quienes no tienen voz y requieren de nuestras páginas para hacerse escuchar.

La duda de si el silencio anterior de Eliacín Salgado sobre asuntos tan graves como desvíos de recursos, tráfico de plazas, uso de la institución con fines políticos, omisión en la función pública, se trató de una aceptación de culpas nace de la respuesta a esta última denuncia. De todas las gravísimas denuncias, el director del IEBEM decidió responder solo esa con cuatro páginas que acaban concediendo gran parte de la razón a quienes acudieron a La Jornada Morelos con sus denuncias. ¿El resto de las quejas deben darse por buenas entonces? Seguramente será algo de lo que nos enteraremos puntualmente en lo que resta de este año.

En La Jornada Morelos creemos en un periodismo que da voz a todos, especialmente a quienes más lo requieren. La información oportuna y necesaria, la inclusión de la ciudadanía, la escucha de las inquietudes y dolores sociales para visibilizarlos, nos ayuda a cumplir nuestro deber social, nuestra parte en la construcción de una sociedad mejor, de una democracia más representativa, de un Morelos y un México en donde la verdad, como dice La Escritura, nos haga libres con toda la responsabilidad que ello implica.

Nuestra misión es la misma llevar la mejor versión asequible de la realidad, aunque a algunos no guste.