Conferencias Macy. Ingeniería, matemáticas, computadoras y neurología
Como resultado del devastador incendio provocado por la Segunda Guerra Mundial, se propició un fecundo encuentro entre diversas disciplinas que eran rescoldos de aquel incendio. Este encuentro fue propiciado por la necesidad de emancipar el trabajo científico de los hasta entonces dominantes intereses militares. También contaba la creciente convicción de lo pernicioso de la especialización extrema, a diferencia del trabajo interdisciplinario que las condiciones bélicas demandaron. Por ejemplo, la investigación de operaciones surgió para resolver, entre otros, los intrincados problemas derivados de abastecer a un ejército de cientos de miles de hombres del otro lado de los océanos. Ya no sólo se trataba de un problema administrativo o de transporte y logística, sino que implicaba una serie de circunstancias que requerían la opinión de diferentes voces para encontrar la solución óptima.
Las conferencias organizadas por la Fundación Josiah Macy, Jr., fueron una serie de reuniones académicas de diversas disciplinas celebradas en Nueva York bajo la dirección de Frank Fremont-Smith a finales de 1941. Originalmente estaban centradas en disciplinas biomédicas. El objetivo central era promover una comunicación fluida entre las especialidades para lograr restaurar la unidad de la ciencia. Se realizaron un total de 160 conferencias durante los casi veinte años que este programa estuvo activo. Sin embargo ciertas conferencias Macy cobraron celebridad histórica por ser los orígenes de la cibernética, la computación y la inteligencia artificial.
La especialización extrema que se empezaba a practicar dentro de la medicina a partir de las Segunda Guerra Mundial fue detectada por la Fundación Macy como un problema grave, y dado que su objetivo era ayudar a la práctica eficiente de la medicina, se propusieron reunir a destacados especialistas para intentar buscar soluciones. Del 13 al 15 de mayo de 1942 se realizó un encuentro sobre inhibición cerebral. En esa ocasión Gregory Bateson conoció a Warren McCulloch y escuchó por primera vez el concepto de retroalimentación negativa que junto con su esposa Margaret Mead se vio reflejado en su posterior obra como científicos sociales años después.
Tras la guerra, las Conferencias Macy realizadas entre 1946 y 1953 en Nueva York, fueron encuentros interdisciplinarios que sentaron las bases de la cibernética y promovieron el pensamiento sistémico. La conferencia inaugural titulada “Mecanismos de Retroalimentación y Sistemas de Causalidad Circular en Sistemas Biológicos y Sociales”, se realizó el 8 y 9 de marzo de 1946 y reunió, entre otros, a estos diez notables científicos.
Norbert Wiener: Matemático y fundador de la cibernética. Presentó conceptos fundamentales sobre cómo los sistemas, mecánicos o biológicos, utilizan la retroalimentación para autorregularse. Su trabajo enfatizó la importancia de la comunicación y el control en la comprensión de lo vivo y lo mecánico.
John von Neumann: Reconocido matemático que propuso la aplicación de la teoría de juegos y la lógica matemática para modelar procesos cognitivos y sistemas complejos aportando una perspectiva lógica cuantitativa al estudio de las mentes y las máquinas.
Warren Sturgis McCulloch: neurofisiólogo y cibernético, exploró la relación entre la estructura neuronal y los procesos mentales. Desarrolló modelos matemáticos de redes neuronales que simulan funciones cognitivas, sentando las bases para la inteligencia artificial.
Arturo Rosenblueth: Fisiólogo mexicano, presentó trabajos sobre la teleología en sistemas biológicos, analizando cómo los organismos exhiben comportamientos dirigidos a objetivos sin necesidad de una intención consciente.
Walter Pitts: Matemático autodidacta, colaboró con McCulloch en la creación de modelos formales de redes neuronales, demostrando cómo las neuronas podrían implementar funciones lógicas y cómo estas redes podrían aprender y adaptarse.
Margaret Mead: Antropóloga cultural que aportó una perspectiva social y cultural al debate, enfatizando la importancia de comprender los sistemas humanos en contextos sociales y cómo la cultura influye en el comportamiento y la comunicación.
Gregory Bateson: Sociólogo de la comunicación que exploró la cibernética en contextos sociales y ecológicos, analizando patrones de comunicación y aprendizaje en sistemas vivos, y cómo estos patrones afectan la evolución y adaptación posterior.
Heinz von Foerster: biofísico interesado en la teoría de sistemas y la cibernética de segundo orden.
Lawrence K. Frank: sociólogo que promovió la interdisciplinariedad en las ciencias sociales y naturales.
Ralph W. Gerard: neurofisiólogo que aportó las bases sobre el complejo funcionamiento del sistema nervioso.
Las discusiones en esta conferencia inaugural cimentaron las siguientes reuniones, fomentando una mejor comprensión de los sistemas complejos y la comunicación. Estas interacciones fueron cruciales para el desarrollo de la cibernética y su influencia en campos como la computación, la sociología, la lingüística y la inteligencia artificial.