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Durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (2018-2024) se llevaron a cabo reformas significativas en el sistema de pensiones de México, buscando mejorar la situación de las y los pensionados. Estas reformas se dieron en un contexto de crisis económica, bajo un modelo de pensiones que combina un sistema de reparto y otro de capitalización individual a través de las Administradoras de Fondos para el Retiro (AFORE). Aunque el gobierno de AMLO, al ser de izquierda, podría haber optado por una re-estatalización de las pensiones como ocurrió en algunos países de América Latina y Europa del Este, solo se realizaron cambios al mismo sistema privatizado, orientados a aumentar los beneficios para los trabajadores, generando grandes retos para la sostenibilidad financiera del sistema. A continuación, se presentan las principales reformas al sistema de pensiones durante este período:

1. 2018 – Anulación de pensiones para expresidentes

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Una de las reformas iniciales fue la eliminación de las pensiones para expresidentes, implementada a través de la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos. Esta ley eliminó las pensiones de privilegio que disfrutaban tres expresidentes de México, y dispuso que cualquier pensión o compensación de funcionarios públicos debe estar respaldada por ley, contrato o condiciones generales de trabajo. Esta reforma buscó reducir las prerrogativas discrecionales y promover la transparencia en el sector público.

2. 2020 – Reforma constitucional para las pensiones no contributivas

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El 8 de mayo de 2020, se modificó el artículo 4 de la Constitución para garantizar una pensión no contributiva a los adultos mayores. Las personas mayores de 68 años, y 65 para los pueblos indígenas y afrodescendientes, tienen derecho a recibir una pensión del Estado, independiente de si cuentan o no con una pensión contributiva. Esta pensión no alcanza el nivel de un salario mínimo, pero está diseñada para cubrir el costo de la canasta básica, buscando mejorar las condiciones de vida de los adultos mayores en situación de pobreza.

3. 2020 – Límite del cobro de comisiones de las AFORE

En diciembre de 2020, se reformó la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro, estableciendo un límite máximo para las comisiones que las AFORE pueden cobrar por la administración de los fondos de retiro de los trabajadores. El objetivo era reducir los costos que los trabajadores deben pagar a las AFORE, lo cual podría mejorar los rendimientos que reciben, al alinearse con los estándares internacionales de países con sistemas de pensiones similares.

4. 2021 – Reforma a las pensiones contributivas del IMSS

Una de las reformas más relevantes fue la modificación a la Ley del Seguro Social aprobada en diciembre de 2020, con efectos a partir de enero de 2021. Esta reforma introdujo varios cambios importantes:

  • Pensión garantizada: La reforma modificó el cálculo de la pensión garantizada, que anteriormente se basaba en el salario mínimo y ahora se calcula en unidades de medida y actualización (UMA). Además, redujo el número de semanas mínimas de cotización de 1250 a 750, con un aumento gradual hasta 1000 semanas. La pensión garantizada ahora varía entre 2,622 y 8,241 pesos mensuales, dependiendo de la antigüedad laboral y el salario del trabajador.
  • Diversificación de pensiones: Las y los trabajadores ahora pueden combinar los esquemas de renta vitalicia y retiros programados para mejorar sus opciones de pensión, siempre que la renta vitalicia supere el mínimo establecido por la ley.
  • Aumento en la aportación patronal: Se incrementó la aportación patronal, que pasará del 3.15% al 11.875% del salario base de cotización de cada trabajador, de manera gradual hasta 2030. Esta medida busca incrementar los fondos disponibles para las pensiones, aunque no hubo un aumento en la aportación estatal.

5. 2023 – Acuerdo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para evitar evasión de contribuciones

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El IMSS implementó en mayo de 2023 un acuerdo para evitar la evasión de contribuciones por parte de los patrones. El acuerdo prohíbe la práctica de registrar pagos como “ingresos exentos” para evadir las contribuciones a la seguridad social, lo que ha sido un problema recurrente en el sistema, que afecta directamente las finanzas del propio instituto y en el otorgamiento de las prestaciones a los derechohabientes.

6. 2023 – Inclusión de trabajadores independientes y de las personas unidas mediante: uniones civiles

En diciembre de 2023, se aprobó una reforma a la Ley del Seguro Social que incluye a los trabajadores independientes o por cuenta propia en el sistema de pensiones. Además, se reconoce a las uniones civiles con los mismos derechos que los matrimonios tradicionales, lo que facilita su acceso a la seguridad social. También, establece nuevas reglas para la cotización y el pago de cuotas, permitiendo a los asegurados elegir diferentes periodicidades de pago sin recargos y posibilita convenios para la retención y pago de cuotas.

7. 2024 – Creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar

El 30 de abril de 2024, se creó el dicho fondo como un nuevo fideicomiso, que tiene como objetivo recaudar y administrar recursos para financiar el aumento de las pensiones. Este fondo se alimentará de recursos de diversas fuentes, incluyendo incautaciones del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado y utilidades de proyectos como el Tren Maya y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles. Las AFORE también deberán transferir los saldos de los trabajadores que no hayan solicitado la devolución de sus fondos a este fondo a partir de los 70 años. Esta reforma viola el principio de imprescriptibilidad de las pensiones.

8. 2024 – Restructuración del sistema de pensiones

Finalmente, en mayo de 2024, se implementó una reforma adicional que tiene dos objetivos principales:

  • Pensión del 100% del salario: Las y los trabajadores afiliados al IMSS podrán pensionarse (si ya son pensionados no les aplica) con el 100% de su salario, siempre que este sea igual o inferior al salario promedio mensual calculado por el IMSS (aproximadamente 16,777 pesos) y siempre y cuando haya fondos para ello.
  • Fondo de Pensiones para el Bienestar: La reforma establece que este fondo, gestionado por el Banco de México y supervisado por la Secretaría de Hacienda, complementará las pensiones de los trabajadores con ingresos bajos. El fondo recibirá aportaciones del gobierno y otras fuentes específicas, y se gestionará bajo un régimen de transparencia y rendición de cuentas.

Sin duda, las reformas implementadas por el anterior gobierno mejoraron las pensiones para los más pobres, pero el sistema sigue enfrentando retos estructurales. El envejecimiento de la población, la falta de suficientes contribuciones por parte de los trabajadores activos y la viabilidad financiera del sistema continúan siendo problemas críticos que no han sido resueltos de manera efectiva. Las reformas, aunque positivas en algunos aspectos, no abordan de fondo estos desafíos y plantean dudas sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones a largo plazo.

*Seguróloga social y Profesora-investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos.

La Jornada Morelos