Vique vs. Eliacín, así se ve el IEBEM del futuro
Puede que a muchos no haya gustado el adelantado nombramiento que la gobernadora electa, Margarita González Saravia, hizo de Leandro Vique Salazar como director del Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos, pero quien seguramente estará más molesto y preocupado es Eliacín Salgado de la Paz, quien desde hace casi seis años cobra la plaza y sobre quien pesan acusaciones de todo tipo, muchas de ellas conocidas de sobra por quien lo relevará, que fungió por casi tres años como director de desarrollo educativo del IEBEM cargo en que fue nombrado justamente por Eliacín Salgado de la Paz.
Hasta pocos días antes del nombramiento, el aún director del IEBEM aseguraba que estaba negociando su permanencia en el instituto, o bien el nombramiento de alguno de sus colaboradores cercanos, algunos mencionaron a Felipe Domínguez Alarcón quien colaboró en la campaña de Margarita González Saravia, pero también fue fundamental en la creación del Movimiento Magisterial Morenista. Domínguez Alarcón también encabezó una de las diez planillas que disputaron la dirigencia de la sección 19 del SNTE, justamente la candidatura con la que Eliacín Salgado trató de frenar, sin ningún éxito, las aspiraciones de Joel Sánchez Vélez. Aunque Felipe Domínguez habría sido una propuesta interesante para el IEBEM, el apoyo de Eliacín fue como el beso del diablo, así que la gobernadora electa probablemente ni lo consideró.
Vique se perfilaba desde hace poco más de un año como el candidato de Margarita González Saravia a la dirección del IEBEM, la acompañaba en eventos con el sector educativo, y alguna vez, antes incluso de la precandidatura de quien será gobernadora desde el 1 de octubre, dieron una conferencia de prensa juntos para hablar de los libros de texto gratuito. Para entonces, Leandro ya había renunciado, algunos dicen que bastante sonoramente al cargo en Desarrollo Educativo, y acabó de pleito con Eliacín Salgado, dado el manejo que daba al IEBEM.
Así que Vique Salazar conoce bien gran parte de las irregularidades cometidas por Eliacín Salgado y los subalternos en quienes se apoyaba para ello que incluyen a funcionarios del IEBEM; pero también a supervisores y algunos jefes de sector. Si hay alguien que podría detectar todas las anomalías de la administración de Eliacín Salgado es, justamente, Leandro Vique, faltará solamente que quiera hacerlo porque ya advirtió la gobernadora que no se protegerá a nadie que haya cometido corruptelas en la anterior administración.
Así que si alguien se preocupaba por las sanciones que debieran aplicarse a quienes usaron al IEBEM para lograr beneficios al margen de la norma, podrá estar tranquilo. El problema, en todo caso, es que la educación básica de Morelos requiere mucho más que acciones de limpia y castigo a los corruptos. ¿Podrá Leandro Vique con todo eso?
Conocimos al profe Vique hace muchísimos años, poco antes de ser responsable de las relaciones públicas de Mario Luis Salgado Salgado, quien en el 2000 fue secretario general de la sección 19 del SNTE.
A lo mejor pocos se acuerdan y muchos más no tienen porqué saberlo aún porque son más jóvenes, pero Mario Luis Salgado ganó la dirigencia de la sección a Ageo Anaya Crisantos, el favorito de la casi invencible entonces Elba Esther Gordillo Morales, gracias a su liderazgo y el trabajo de un equipo compacto de líderes magisteriales. Aquel grupo de impetuosos maestros que formaron una planilla casi sobre las rodillas porque les habían hecho “de chivo los tamales” y algunos de quienes los apoyaron se fueron al equipo contrario “por instrucciones de La Maestra”, incluía, entre otros, a Joel Sánchez Vélez y Leandro Vique Salazar.
Luego habría distanciamientos, Vique intentó ser dirigente de la sección en cuando menos tres ocasiones y Joel en tres más una (la que finalmente logró); justo en esa última, hace un año y medio, Vique decidió apoyar a Joel Sánchez y no formar una planilla para contender.
Esta historia podría anticipar una buena relación entre la dirección del IEBEM y el SNTE por primera vez en muchos años; mucho más si se suma el que la relación entre la gobernadora y el SNTE es muy buena, la de la dirigencia nacional del SNTE con Morena y el gobierno federal es de alianza; y que el partido del magisterio, Nueva Alianza, apoyó la campaña de la hoy gobernadora electa, todo tendría que transitar fácilmente. (Por cierto, es la primera vez que Nueva Alianza forma coalición con alguien que haya ganado la gubernatura de Morelos, normalmente habían apostado por la candidatura equivocada).
Falta que no se atraviese, como solemos decir, la cochina realidad y las cosas de descompongan; y acá el profe Vique tendrá las mismas tentaciones que han padecido otros directores del IEBEM, los compadrazgos, el nepotismo, la soberbia, la corrupción, el desaseo, el uso de la institución para negocios personales, la mediocridad. Cada una de ellas serán retos diarios para vencer y para ello deberá forrarse de los mejores cuadros y atender a los consejos de los especialistas, pero también a las evaluaciones de resultados. Seguir más a sus críticos que a los muchos, y abundarán, que lo llenen de elogios. Vique es un humano muy humano, con todo lo que eso representa en ventajas y en riesgos.
Por lo pronto habrá que recordarle, porque con eso se va a encontrar desde el primer día, que los problemas no se solucionan con su nombramiento ni con las buenas intenciones. El 2 de octubre las escuelas seguirán hechas un desastre por falta de mantenimiento y de vigilancia, los profes seguirán padeciendo los efectos de la falta de pagos y las asignaciones indebidas de plazas, los estudiantes sufrirán aún por la baja calidad del servicio educativo, la corrupción en la educación básica no se habrá ido. Así que habrá que ponerse a trabajar.
Leandro Vique no pudo ser líder del magisterio morelense, pero está en una posición de mucha mayor responsabilidad.
@martinellito / martinellito@outlook.com