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Taxonomía fantástica de Úrsula, la bruja del mar

Agustín B. Ávila Casanueva*

Úrsula es una terrible bruja de mar. Aunque aparenta estar del lado de Ariel, rápida y musicalmente nos damos cuenta de quesólo quiere reclutarla a las filas de las pobres almas en desgracia. También debemos de aclarar que esto no es un resultado de alguna enemistad directa con Ariel, sino una manera de buscar venganza sobre su padre, Tritón. Poco a poco empezamos a ver a Úrsula como un personaje complejo. Pero Úrsula se convierte en una verdadera pesadilla no tanto en su relación con las demás criaturas del mar, sino cuando algún biólogo o taxónoma intentan clasificarla en el árbol de la vida. Es un pulpo con huesos, canta bajo el agua ¿tiene pulmones o respira por las branquias? Es una contradicción biológica constante.

Tal vez una manera más sencilla de empezar su descripción es desde la taxonomía mitológica. Úrsula es una cecaelia, es decir, un ser que combina la cabeza, los brazos y el torso de una mujer —raramente de un hombre— y desde la parte inferior del torso hacia abajo, los tentáculos de un pulpo o calamar. El término cecaelia proviene de un cómic corto incluido en el número 16 de la revista Vampirella, publicado en 1972, donde aparece un personaje llamado Cilia con las características físicas antes mencionadas. Si bien la hibridazación de mujeres y cefalópodos en un solo cuerpoparece ser bastante moderna, desde los tiempos del artista japonés Hokusai (1814), ya se plantea una interconexión entre estos dos organismos.

Habiendo satisfecho las filias etimológicas de esta columna, volvamos a la biología. Si bien suena muy sorprendente que la mitad de un cuerpo se erija sobre una columna vertebral, mientras la otra mitad tenga la fluidez caótica de ocho tentáculos, a nivel genómico el truco no es tan complicado. Solamente sería necesario contar con los genes necesarios para desarrollar huesos y activarlos o apagarlos de manera diferencial en dos mitades distintas del cuerpo. Esto no sería nuevo, finalmente distintos experimentos con moscas de la fruta han demostrado que bastan unas pocas mutaciones para hacer que el organismo genere otro abdomen, o que crezca patas en lugar de piernas. La complicación real reside en el plan de desarrollo de las cecaelias, ya que la mitad superior tiene una simetría bilateral —es decir, tiene dos mitades prácticamente idénticas, si se le parte justo por donde pasa la columna vertebral—, mientras que la mitad inferior tiene una simetría hexarradial —podemos observar que Úrsula tienesolamente seis tentáculos, y no los ocho que normalmente tienen los pulpos, así que, partiendo del centro del organismo, se le puede dividir en seis secciones iguales—. Y un cambio de simetría es algo que, creo, nunca se ha reportado en un solo organismo, ya que complicaría muchísimo el desarrollo del mismo, es decir, el proceso de pasar de cigoto a embrión a organismo adulto. Supongo que aquí entra parte de la magia de las brujas marinas.

Otra cuestión que marca un problema es la respiración de las cecaelias. Úrsula demuestra tener un aparato respiratorio como el nuestro —y con una voz muy bien entrenada, a pesar de no ser sirena—, sin embargo, es capaz de respirar bajo el agua sin mayor complicación. Los pulpos respiran con branquias, como los peces, y al igual que los peces dichas branquias se encuentran cerca de la boca. Pero la boca de los pulpos se encuentra en el centro de su cuerpo, en el lado opuesto de la cabeza y las branquias se encuentran dentro de lo que se llama la cavidad del manto. Además, los pulpos cuentan con tres corazones, dos que bombean sangre hacia las branquias para que se oxigene y otro corazón que bombea esta sangre oxigenada al resto del cuerpo. Y hablando de sangre, mientras la nuestra es roja —porque oxida el hierro presente en la hemoglobina—, la de los pulpos es azul, ya que oxida el cobre de una proteína llamada hemocianina. Mi apuesta sería que las cecaelias tienen dos corazones que bombean sangre azul a las branquias, un corazón que envía sangre oxigenada al resto del cuerpo, dos bocas y tal vez un pulmón que sirva más bien como reserva de aire para poder cantar.

El siguiente punto para discutir sería el cerebro. O más bien, el sistema nervioso. Podemos observar a Úrsula peleándose con sus tentáculos mientras busca ingredientes para una pócima. Y es que, si bien los pulpos tienen un cerebro, sus tentáculos concentran una enorme cantidad de neuronas y en realidad son capaces de tomar múltiples decisiones de manera independiente sin tener que consultar o esperar la señal de un cerebro central. Así que este comportamiento parece también ser propio de las cecaelias.

Aunque me gustaría poder secuenciar su genoma y conocer a detalle todos los secretos moleculares de un organismo como Úrsula, para dar una clasificación certera, creo que podemos definirla —y a las cecaelias— desde el personaje que inspiró el diseño de Úrsula: la drag queen Divine. Bueno, en realidad, desde las palabras de John Waters, un amigo cercano de Harris Glenn, quien interpretaba a Divine. John decía de su amigo: “Él quería ser Godzilla. Bueno, él quería ser Elizabeth Taylor y Godzilla puestos juntos. Él quería ser un monstruo”, y los monstruos, monstruos son.

*Coordinador de la Unidad de Divulgación del Centro de Ciencias Genómicas de la UNAM y miembro de la Red Mexicana de Periodistas de Ciencia.

Úrsula junto a sus dos morenas, Flotsam y Jetsam.

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