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Mario Alexander Mojica Salgado, un niño de 13 años de edad, salió al medio día del pasado 30 de junio de 2022 a trabajar con su papá en un rancho cercano a la colonia Emiliano Zapata de Tlaquiltenango, se despidió de su mamá y es la fecha en que no ha regresado; su papá fue localizado asesinado en su lugar de trabajo, el rancho “Los Kilos”.

Ya pasaron dos años, dos meses y dos días y es la fecha en que no se muestra ningún avance en las investigaciones. Así lo dio a conocer ayer María Inés Salgado Nava, madre de niño que al momento de su extravío, cuya historia ya se dio a conocer en este medio de comunicación, apenas había cumplido sus 11 años.

Pero la Fiscalía de Morelos, encabezada por el cuestionado titular, Uriel Carmona Gándara, ya no solo no presenta ningún avance, sino que con toda indolencia le dicen que con seguridad el niño está muerto o que lo tiene algún familiar, pero sin precisar, qué familiar, dónde, por qué, en base a qué, no reporta ningún indicio, nada, comentó la madre de familia, quien cada que es entrevistada llora por la desaparición de su hijo y repite: “a mí lo que me importa es mi hijo, necesito a mi hijo, yo no pido nada, ni que castiguen a nadie, solamente quiero que me devuelvan a mi hijo, o que me digan dónde está, quién lo tiene o dónde lo puedo encontrar, es lo único… para mí, como madre yo siento que mi hijo está vivo”, refiere.

María Inés, trabaja en una fondita humilde ubicada muy al interior del mercado “Antonio Riva Palacio López”, uno de los tres mercados de Jojutla, lugar donde accede nuevamente a la entrevista que pone el dedo en la llaga y refiere: “pues no hemos tenido respuestas, del fiscal, no hay apoyo… si se va a pedir información nunca hay, la licenciada (agente del Ministerio Público) a veces no tiene ni las herramientas para trabajar o darnos el servicio y el fiscal dice que está con un familiar o que ya se murió, pero no nos dan respuesta”.

Y se refirió a los dos fiscales, al regional de esta zona sur, y al del estado, con ambos ya se reunió, le dicen que está muerto, “pero no me han dado ni el cuerpo, ni alguna referencia, nunca hay nada. Siempre voy a verlos y me dicen espéreme, voy a checar, esto es cuando voy a Temixco. No se ve en sí una respuesta de ellos, ya son dos años y no hay nada, no hay ningún avance. Yo les pido que me demuestren o que me ayuden o me digan cómo le hago para buscar a mi hijo, solo me dicen que me espere, que sí… pero no veo respuesta ya son dos años”.

Aseguró que su hijo acostumbraba a estar en el interior de su domicilio salvo ese día que se animó a acompañar a su papá, de hecho, “de donde se lo llevaron fue de adentro del domicilio de donde trabajaba su papá”, es decir, de la vivienda del rancho “Los Kilos”, sin embargo, la madre de familia refiere que desconoce si ha sido llamado a declarar el dueño de la casa donde fue hallado muerto su exesposo y de donde desapareció su hijo, “siempre se mantuvo al margen”. Tampoco ha sido interrogada la mujer con la que vivía el papá de su hijo.

Solo ha sido tomada en cuenta cuando encuentran cuerpos inhumados clandestinamente a donde ha participado, pero los hallazgos no coinciden con las características del niño Alexander, fue a Zacatepec, cerca de Jojutla, se puso en contacto con madres buscadoras, “he mandado fotos, también a Sinaloa y no, no se ha encontrado el cuerpo de mi hijo. Sigo buscando y ahora sí que me estoy metiendo con los ‘buscadores de tesoros’ que son los padres para encontrar a mi hijo porque de otro medio no, aquí las autoridades, ni el fiscal, menos del fiscal, he recibido apoyo… de todo lo que les menciono me dicen que no se puede”.

Captura de pantalla de un celular de un periódico

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