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En un acto de reflexión y oración, el secretario del CEM (Conferencia del Episcopado Mexicano), Ramón Castro Castro, dedicó su homilía dominical al legado del sacerdote Marcelo Pérez, quien fue asesinado hace quince días en Chiapas.

Desde la Catedral de Cuernavaca, el también Obispo de la Diócesis, se sumó a la Jornada Nacional de Oración, rindiendo homenaje a un hombre que, como destacó, “amó hasta el extremo” y se entregó a la defensa de los derechos de las comunidades indígenas.

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“El Padre Marcelo fue un ejemplo de caridad y entrega hacia sus hermanos. Su asesinato es una realidad inaceptable”, afirmó el jerarca, resaltando el compromiso del sacerdote con los pueblos indígenas de Chiapas, reconocido tanto a nivel nacional como internacional por su labor. “Su vida y su sacrificio son un llamado a todos nosotros para servir y hacer el bien”, subrayó Castro.

Durante la homilía, se encendió la “Lámpara de la Paz”, un símbolo potente de esperanza y reconocimiento al Padre Marcelo, cuyo resplandor representa la unidad y el compromiso por la justicia. «Al encenderla, recordamos a un hijo de la Iglesia Católica y un hermano que no debe ser olvidado. Todos debemos trabajar para que se haga justicia», expresó el secretario del CEM.

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El prelado recordó que desde 2014, el Padre Marcelo se convirtió en un líder destacado en la lucha contra el crimen organizado en Chiapas, organizando diversas caminatas y peregrinaciones por la paz, donde miles de personas se unían a su causa. “Él sabía que su vida estaba en riesgo; incluso llegó a afirmar: ‘Mi cabeza tiene un valor’. Ofrecieron entre 150 mil y un millón de pesos por matarlo. Este trágico desenlace era, en cierto sentido, previsible”, añadió el jerarca.

Castro enfatizó que la voz del Padre Marcelo no solo incomodaba a las organizaciones criminales, sino también a aquellos que explotaban de manera injusta los recursos naturales de Chiapas. “Denunciaba tanto la injusticia del crimen organizado como la avaricia de quienes se benefician a costa de los recursos de nuestra tierra”, destacó.

A pesar de la captura del autor material del asesinato, el secretario del CEM expresó su escepticismo sobre la posibilidad de alcanzar a los verdaderos responsables detrás de este crimen. “Si bien se ha detenido al autor material, dudo que se llegue a quienes ordenaron el asesinato del Padre Marcelo”, afirmó con gravedad.

Esta homilía se enmarcó dentro de una peregrinación que reunió a miles de fieles, quienes elevaron sus voces en un clamor colectivo por la paz y la seguridad en Chiapas. El evento culminó con un poderoso llamado a la solidaridad y al coraje, instando a todos los presentes a «no tener miedo», recordando que el Padre Marcelo nunca se dejó amedrentar.

Estrella Pedroza