La Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) inició sus foros de consulta sobre la Reforma Judicial con la intención de llevar las voces de la sociedad civil, los abogados, jueces y magistrados, estudiantes, y académicos, al Congreso de la Unión y para que puedan ser consideradas en el proceso de discusión y modificación de la estructura y alcances del Poder Judicial.
En el primer día, activistas de la sociedad civil participaron compartiendo su visión y las consideraciones sobre la reforma.
Gloria Rosario Vergara Salinas, directora de la Facultad, inauguró el diálogo que, por primera vez, incluye la experiencia de la sociedad frente a un poder público. La universidad pública y la facultad de Derecho deben hacer la tarea de escuchar a la sociedad, aseguró.
La activista Gloricela Gaona Villanueva, aseguró que ha habido interés de la sociedad en una reforma al Poder Judicial y que la propuesta por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, busca el fortalecimiento de ese poder y lograr la austeridad “hemos visto cómo a través del Poder judicial hay derroche en varios aspectos personales”.
No todos los males del país vienen del Poder Judicial
Elías Barud Estrada, también activista, expuso que con la Reforma Judicial está en juego la impartición de justicia en el país, “el dirimir los derechos fundamentales” de los mexicanos. Señaló que si bien hay un dictamen ya, aún quedan dudas sobre muchos de los aspectos de la reforma que, al ser Constitucional, tendría que gozar del apoyo de la mayoría de los Congresos estatales. Señaló que no hay forma de estar totalmente de acuerdo con quienes defienden la reforma, pero tampoco con quienes la atacan. “Nuestro país, nuestro estado es demasiado plural, diverso como para tener una sola visión de país”, aseguró y lamentó que haya quienes defienden acríticamente al Poder Judicial “como si nuestro país fuera un ejemplo a seguir”, pero también que haya quienes lo atacan “asegurando que todos los males del país se deben al Poder Judicial, lo cual también es erróneo”.
Barud Estrada reconoció que el Poder Judicial requiere una reforma, igual que todas las instituciones del país, pues no hay una que carezca de fallas, “porque en todos estos entes participan seres humanos, y hay errores”. Expuso un paralelismo con un diagnóstico médico en que el tener un problema en un brazo o una pierna obligara a la amputación de ese miembro “hay otras formas de darle solución a esos males”. Expuso que de los problemas a atender en el Poder Judicial está el alto rezago en sentencias y juicios de amparo sin resolución por más de diez años, “no se pone en práctica el principio de justicia pronta y expedita y en algunos de los casos los justiciables ya han fallecido”. Tampoco hay forma de defender salarios de hasta 400 mil pesos mensuales, ni la burocracia silente del Poder Judicial.
Reformas para agradar al pueblo, pero inútiles
Benjamín Apolinar Valencia, lamentó que las reformas en México vayan más encaminadas a ganar respaldo popular que efectividad en el accionar del Estado. “Esta reforma (al Poder Judicial) va encaminada a eso, a las masas que digan que vamos a tener mejor justicia, que va a ser pronta, que va a ser expedita. No va a pasar nada. Después de que se reforme, porque es muy probable que esto pase… México va a seguir siendo el mismo”.
Denunció una política de desprestigio al Poder Judicial con denuncias de corrupción y sueldos excesivos, y acusó que gran parte de las liberaciones de delincuentes peligrosos se dan por mala integración de los expedientes en las fiscalías. Reconoció que son necesarios cambios en el Poder Judicial, pero recordó que desde 2008 existe una reforma judicial para la que no se ha terminado de capacitar a las policías que ignoran cómo integrar una carpeta de investigación.
El también activista reconoció que el método de selección de jueces, magistrados y ministros que propone la reforma promueve un mayor equilibrio entre los poderes, pero la elección, aunque prohíbe la vinculación de partidos políticos en la elección de miembros del poder judicial, seguramente encontrarían la forma de influir, “quien tenga la capacidad de acarreo, de movilización política, va a ganar”; lo que va en contra de la democracia y de la Convención Interamericana de los Derechos Humanos.
Una “sacudida” al Poder Judicial y foros innecesarios
Lorena Hernández Bruno, aseguró que la elección por voto popular de magistrados, jueces y ministros favorecería la alternancia de magistrados, pero deberá revisarse una medida de evaluación del funcionamiento de las autoridades judiciales electas.
Luis Alberto Machuca Nava, exdiputado local, reconoció que los cambios generan controversia pero es fundamental entender que se requiere una profunda reforma judicial. “La Corte debe cambiar, debe haber una sacudida al Poder Judicial, hemos visto un sinfín de vicios que se generan al interior de un Poder que lleva muchos años sin un movimiento… hay nepotismo… hay muchos vicios que tienen que cambiar… Debemos generar un equilibrio de poderes”, dijo, y si no hay elección para el Poder Judicial no hay equilibrio “once personas que no las eligió nadie pueden tomar decisiones por encima de dos poderes (Ejecutivo y Legislativo)” que fueron electos por la ciudadanía.
Israel Baltazar Álvarez Sánchez, aseguró que dada la mayoría calificada que Morena obtuvo en la elección del 2 de junio, una consulta sobre la reforma judicial es innecesaria y que las modificaciones al Poder Judicial son necesarias por la percepción ciudadana de crisis en ese poder y a que pocas veces existen resoluciones prontas “con alto costo a la credibilidad del gobierno” y eso incluye a los tres poderes. Aseveró que la reforma proyectada está incompleta pues no propone una a la figura del Ministerio Público que busque evitar la mala integración de carpetas de investigación que obligan a la liberación de presuntos delincuentes. También criticó las altas percepciones de los funcionarios del Poder Judicial que no han servido para eliminar sino para encarecer la corrupción; y llamó a que no se violenten los derechos de los trabajadores.
La crisis viene desde las policías
Nora Rebeca Romero Velázquez advirtió que en México no existe la justicia sino la legalidad, “que parte de los marcos jurídicos” pero “no siempre va a llegar a ser justo”. Bajo esa premisa, dijo, hay una grave crisis en el Poder Judicial. Recordó que policías, ministerios públicos y peritos tienen un derecho de excepción laboral que sólo opera en el sector de Seguridad Pública. “No hay estabilidad laboral para los policías”, expuso y recordó la nota de La Jornada Morelos respecto a que hay en Morelos un policía por cada dos mil personas.
Sin lugar a duda hay una grave crisis en las fiscalías, aseguró. “No podemos hablar de una división de poderes y que se trastoca a través de una reforma judicial… porque ya existen antecedentes… donde la injerencia de seguir una línea nos ha llevado a una crisis en materia de seguridad pública. Esta crisis no es gratuita, hay un antecedente constitucional por los diputados que fue convalidado por el Poder Judicial de la Federación y que ahora… estamos viviendo”. Consideró necesaria una reforma al Poder Judicial, pero integral, “creo que es importante que se avance en ella porque en cascada tendrá que impactar a los poderes judiciales locales” porque, dijo, nadie está asumiendo sus responsabilidades. Reconoció que la reforma es perfectible, y alegó que el argumento de trastocar la división de poderes no es válido porque hay evidencia de muchas decisiones judiciales que llevaron línea del Poder Ejecutivo.
Promotores de los Derechos Humanos aseguran que las modificaciones al Poder Judicial requieren una revisión profunda para que realmente mejoren la impartición de justicia. Foto: Cortesía