Aunque esta semana Morelos superó el total de casos de dengue registrados en el 2023, que había sido el año con más contagios confirmados en la historia reciente, la velocidad con que se han ido acumulando los casos se ha reducido y entre el 2 y el 9 de septiembre se presentaron 305 casos nuevos, alrededor de cien menos que en semanas anteriores.
El peligro no ha cesado, especialmente porque la temporada de lluvias favorece la reproducción del mosquito transmisor.
Hasta ahora, de acuerdo con el Sistema Especial de Vigilancia Epidemiológica de Dengue de la Secretaría de Salud federal, en Morelos se han confirmado 4 mil 534 casos de dengue, ya 146 más que los registrados en todo el año pasado, y 305 más que en la semana anterior.
Del total de casos, 2 mil 433 fueron clasificados como graves o con signos de alarma y 2 mil 101 como no graves. El total de muertes derivadas del padecimiento sigue siendo de 28, el mayor en el país.
A los municipios con mayor incidencia de casos graves y con signos de alarma se sumó Cuautla, con una tasa de 177.22 por cada cien mil habitantes; en Zacatepec la misma tasa es de 311.69; en Jojutla 379.27; y en Temoac alcanza los 615.05.
En el estado, Eduardo Sesma Medrano, jefe del Departamento de Epidemiología de Servicios de Salud Morelos, ante la prevalencia de clima lluvioso pidió redoblar esfuerzos, como: lavar bebederos de mascotas, floreros y piletas; tapar tinacos, cisternas y cubetas; voltear botellas o botes en desuso; así como, tirar trastes o recipientes que puedan almacenar agua de lluvia y que no se utilicen.
Asimismo, recomendó colocar mosquiteros en puertas y ventanas, usar repelente contra mosquitos y vestir con ropa que cubra la mayor parte del cuerpo, como: camisa de manga larga y pantalón.
