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El interés artístico morelense se vio reflejado la tarde del pasado viernes 30 de agosto en el Museo Morelense de Arte Contemporáneo (MMAC) Juan Soriano, donde más de 100 artistas plasmaron sus intereses e ideas en obras, como pintura, escultura e incluso piezas con inmersión auditiva y visual.

Dicha exposición lleva por nombre “Entre los árboles”, su inauguración se llevó a cabo en punto de las 18:00 horas, con la asistencia de aproximadamente 732 personas y un flujo constante durante 2 horas.

La exposición estará disponible por lo menos dos meses, ya que pese al fin de esta administración, “se acordó con la nueva Secretaría de Cultura y los artistas que duraría al menos hasta noviembre.” Afirmó el director de comunicación del MMCA, Juan Pablo Picazo, quien también cree posible que se alargue la estadía hasta diciembre.

Él nos recuerda que Morelos ha sido escenario atractivo para el turismo y el sector empresarial, además, ha sido el anfitrión de extranjeros que se han dedicado a escribir y crear obras, como el caso del escritor y psicoanalista Erich Fromm, desarrollando su libro “El miedo a la libertad” y dejando huella en el psicoanálisis en México dado que estableció el Instituto Mexicano de Psicoanálisis; o la visita del científico alemán Alexander con Humboldt, haciendo una descripción geográfica, climática y natural.

Para Juan Pablo, también escritor y periodista, el estado ha pasado de ser un observador a un participante activo, con sus artistas notables reconocidos a nivel nacional e internacional: “Como sea, aquí están algunos de los artistas cuya expresión combinada —y cada uno en sus preocupaciones estéticas, estilos y su circunstancia— forman de algún modo el rostro y el corazón artístico de este Morelos que somos todos.”

Finalmente, encontramos una obra escrita donde María Olivera y Antonio Outon describen este bosque artístico:

“Entre los árboles se dibujan así veredas a través de semillas, driadas y flores que germinan en tierra fértil. Se abren paisajes, horizontes y futuros posibles donde aparecen despertares y posibilidades. Aquí, en este bosque, conviven y cooperan prácticas artísticas descentralizadas, descolonizadas, desdiferenciadas, en sintonía y armonía.”

Obra: Xoloescuincle. Creada con piezas “chatarra” de automóviles.

Una multitud de gente

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