“Vivir es escribir con todo el cuerpo”
La obra y vida del escritor Vicente Quirarte serán celebradas por su alma mater, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), con un coloquio y una exposición en la Biblioteca Nacional de Ciudad Universitaria.
Aunque el coloquio “Vivir es escribir con todo el cuerpo”, tiene como motivo celebrar con el autor sus 70 años de vida, la Universidad aprovecha la oportunidad “para analizar el impacto de una vida dedicada -con ética y entusiasmo- a los lenguajes artísticos y la configuración de nuestra percepción sociocultural”, como dijo el rector de la Máxima Casa de Estudios, Leonardo Lomelí.
“Tu vida y obra son un ejemplo de pasión, dedicación, libertad y compromiso que sirve de inspiración para el camino de muchos. En nombre de la Universidad Nacional Autónoma de México te expresamos nuestra más sincera admiración y gratitud”, subrayó el rector al inaugurar los trabajos ayer en el auditorio “José María Vigil”, de la Biblioteca Nacional de México.
Vicente Quirarte Castañeda, avecindado en Morelos desde hace varios años, nació en la Ciudad de México en 1954; es licenciado en Lengua y Literatura Hispánicas por la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, además de maestro en Letras Hispánicas y doctor en Literatura Mexicana también por la Universidad Nacional, en donde también ha sido profesor, investigador, director general de Publicaciones, director del Instituto de Investigaciones Bibliográficas y de la Biblioteca Nacional de México, y miembro de la Junta de Gobierno. Actualmente es investigador Titular “C” de tiempo completo definitivo en el Instituto de Investigaciones Bibliográficas.
Se ha destacado en la poesía, en la narrativa y en el ensayo. Ha publicado más de 150 artículos especializados, ha publicado más de 20 títulos de poesía y Como dramaturgo ha escrito, y han sido llevadas a escena, diversas obras suyas basadas en hechos y personajes históricos. Su obra ha sido traducida al inglés, francés, alemán y portugués.
“Debo a la Universidad mi compromiso con la palabra”
El propio Quirarte comenta que su “primer intento que hice con la palabra impresa tuvo lugar el año 1977, cuando mis poemas aparecieron en la revista Punto de partida. El año 2000 la Universidad publicó mi poesía reunida bajo el título Razones del samurai. La universidad ha sido la gestora y la sede de mis obras de teatro. De tal manera debo a ella mi compromiso con la palabra en todos los renglones donde he intentado llevar a cabo mi propia aventura”.
El rector Lomelí subrayó que el poeta es un orgullo para la Universidad Nacional pues es “uno de sus más ilustres egresados, cuya trayectoria ha dejado marcas indelebles a nivel nacional e internacional. Su amplia obra se destaca por explorar y difundir las letras universales, latinoamericanas y mexicanas con honestidad intelectual, así como con una sensibilidad y erudición que ha inspirado a generaciones de lectores y escritores. A través de su pluma, el doctor Quirarte ha abierto una ventana luminosa para pensar nuestra identidad intercultural, entrelazando el pasado y el presente con una maestría única”.
Un hijo leal de la Universidad
El presidente de la Fundación para las Letras Mexicanas, Miguel Limón Rojas, aseguró que Vicente Quirarte evoca el poderoso espíritu que por generaciones ha animado la vida de la Universidad Nacional: la creación e impartición de conocimiento que contribuye a saber quiénes somos y cómo ser mejores.
El poeta, dijo, es un hijo verdadero y leal de la UNAM, quien con humildad y entrega ha desarrollado el oficio de escritor. Para la Fundación su presencia ha sido enriquecedora y estimulante, ha hecho múltiples aportaciones y brindado su consejo ilustrado y oportuno, ha apoyado a la evaluación de jóvenes para ingresar a sus becas y ha tenido una participación esmerada y comprometida como tutor de los grupos de ensayo. “Es un honor participar en este homenaje que la Universidad merecidamente te ofrece”.
En tanto, el presidente de El Colegio Nacional, Eduardo Matos Moctezuma, apuntó que con el coloquio se celebran siete décadas de aplomo, perseverancia y poder creativo de quien es profundamente universitario y ha logrado consolidar su obra con pluma ágil y pensamiento lúcido.
A su vez, el director de la Academia Mexicana de la Lengua, Gonzalo Celorio Blasco, destacó que su relación afectiva e intelectual con Quirarte data de los años 70 y se ha enriquecido a lo largo del tiempo, en el que han coincidido en instituciones como la Academia -de la que el poeta es miembro desde 2002- y la UNAM, que ha sido la casa nutricia de ambos.
El homenaje, agregó Celorio Blasco, da cuenta de la amplitud de los intereses de Quirarte cuya producción incluye poesía lírica, teatro, narrativa, ensayo, historiografía, crónica, autobiografía; además se aborda su papel de editor, bibliófilo, interlocutor de fantasmas, vampiros, cazador de imágenes balleneras, historiador, erudito, amante de la historia de México, viajero infatigable, académico riguroso, nacionalista y universal. “Sus obras constituyen un universo complejo y completo; uno y diverso. El universo de Vicente Quirarte en el que no podemos dejar de gravitar. Felicidades, Vicente tan querido”.
El coordinador de Humanidades de la UNAM, Miguel Armando López Leyva, recordó que Quirarte es universitario desde los 12 años, cuando ingresó a iniciación universitaria; luego cursó sus estudios de licenciatura y, posteriormente, se incorporó como investigador por obra determinada y posteriormente fue director general de Publicaciones de esta casa de estudios, director del Instituto de Investigaciones Bibliográficas, así como de la Hemeroteca y Biblioteca nacionales, de las cuales ha sido su defensor.
La actual directora del Instituto de Investigaciones Bibliográficas, María Andrea Giovine Yáñez, comentó que “en estos primeros 70 años has elogiado la calle y el amor, defendiste el honor, vitalidad y permanencia de la Biblioteca Nacional en un momento paradigmático de nuestra historia institucional a inicios del milenio, y libro a libro, página a página has dejado huella indeleble en muchos corazones. Felicidades, poeta y amigo. Felicidades, señor exdirector, presidente honorario de la Biblioteca Nacional. El corazón de esta institución late con emoción en este merecido reconocimiento a tu vida y trayectoria”.
“Los Otros Sentidos”
El coloquio se extiende durante las próximas semanas en la Biblioteca Nacional de México y el homenaje continúa en otros espacios como El Colegio Nacional y en la Feria Internacional del Libro Universitario. En la Biblioteca Nacional permanecerá la exposición “Los Otros Sentidos, Colectiva Dedicada al Dr. Vicente Quirarte” que presenta obra plástica en honor al autor y objetos personales y libros que lo acompañen en su labor creadora.
En recuadro
«Hijo de la Universidad»
De las características humanas que nos distinguen de nuestros hermanos animales, está la posibilidad de expresar verbalmente nuestra gratitud. Acudo a ella para manifestar públicamente mi agradecimiento a quienes han hecho posible esta actividad. En primer término a la doctora María Andrea Giovine, directora de esta Biblioteca Nacional, cuyo liderazgo y dinamismo han hecho posible la presencia del señor rector, el doctor Leonardo Lomelí Vanegas, quien tiene a su cargo el timón de esta casa generosa que a todos nos acoge: la Universidad Nacional Autónoma de México.
Igualmente agradezco la presencia de los señores coordinadores de humanidades y difusión cultural, así como de las cabezas de la Facultad de Filosofía y Letras, la Academia Mexicana de la Lengua, el Colegio Nacional y la Fundación para las Letras Mexicanas, casas que también han sido la mía gracias a la hospitalidad de quienes las conducen.
“Un gran poder trae consigo una gran responsabilidad”, aprendí de uno de los héroes de mi infancia. Un hablante, en cuanto cobra conciencia de su capacidad verbal, es el más poderoso de los seres. Nombra el mundo, lo bautiza como si con él naciera, porque con él nace. Sin embargo, cuando descubre que su misión es entrar en el corazón de las palabras, hacer su anatomía, tras mutarlas en nuevas y prodigiosas criaturas, comprende la delicada tarea que su tribu le encomienda.
El primer intento que hice con la palabra impresa tuvo lugar el año 1977, cuando mis poemas aparecieron en la revista Punto de partida. El año 2000 la Universidad publicó mi poesía reunida bajo el título Razones del samurai. La universidad ha sido la gestora y la sede de mis obras de teatro. De tal manera debo a ella mi compromiso con la palabra en todos los renglones donde he intentado llevar a cabo mi propia aventura. Por lo tanto, este es un homenaje a la Universidad y a uno de sus hijos que agradece una vez más estar en ella. Gracias, gracias, gracias.
Vicente Quirarte