Por tercer día consecutivo después de la renuncia de su rector, se mantuvo el silencio de las autoridades en el Colegio de Morelos, aunque trabajadores de éste adelantaron que no les ha sido dispersada la nómina a los trabajadores con plaza, y también podrían detenerse los pagos a personal contratado por honorarios.
Los trabajadores aseguraron que a raíz de la salida del rector y a que el secretario General, Domingo Hernández Mendoza, no ha asumido la responsabilidad de encargarse de la administración del Colegio, los recursos para depositar el pago a trabajadores en nómina o por honorarios.
De acuerdo con la cuenta pública del Colegio de Morelos (segundo trimestre del 2024), los servicios de personal equivalen a poco más de un millón 600 mil pesos por quincena, cuya liberación dependería de la firma del responsable administrativo, en este caso el rector. Al no haber responsable administrativo, el flujo en las cuentas estaría detenido.
Otros capítulos de gasto corriente que estarían comprometidos son el pago a proveedores de materiales y suministros y servicios generales, que en conjunto promediarían un gasto mensual de poco más de 700 mil pesos; y las “transferencias, asignaciones, subsidios y subvenciones y pensiones y jubilaciones”, con un promedio de dos millones, 927 mil 660 pesos mensuales en el trimestre pasado de acuerdo con la cuenta pública del Colegio de la que La Jornada Morelos tiene una copia.
