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Corrido del migrante deportado

Vladimir Bendixen *

 

Hasta veinte millones de mexicanos

amenazaron con deportar,

de una tierra que les fue suya

y nos robaron por vil traición.

Hoy les digo a mis hermanos

si esto sucede lo han de pagar.

A esas manos, trabajadoras

yo les dedico esta humilde canción:

Se caerá el imperio racista y clasista

ni su propio fuego podrán apagar,

privatizaron hasta las cárceles

y ni salud pública a su pueblo le dan.

Los «defensores»  de la democracia

hasta a sus aliados quieren intimidar,

su palabra no vale, viven en desgracia

solo a su dios-dinero se permiten amar.

Por eso vemos sus calles repletas

de drogadictos que ellos propiciaron,

las farmacéuticas recetaron tabletas

y del problema nos quieren culpar.

Aunque los faraones de la tecnología

quieran deshacerse de nuestra mano de obra,

siempre habrá casas por construír

y a la gente de campo no la podrán suplir.

Enfermeras, meseros, diestros electricistas,

manposteros, choferes y panaderos,

agricultores, pintores y maquinistas,

carpinteros, mucamas y también bomberos.

Hermanos migrantes, trabajadores honestos

siempre ejemplares en el extranjero,

no se intimiden por planes siniestros

de un presidente que es de mal agüero.

¡Qué nadie se atreva a tocar nuestra soberanía!

ya les recordaron que «tenemos un himno»,

que defenderemos con amor y templanza

 y a nuestra presidenta le tenemos confianza.

Se caerá el imperio por su propio peso

coca-cola en la sangre, armamento en el alma,

Estado fallido, adicto y obeso,

gente enajenada que ni derechos reclama.

Ya con esta me despido

por si los tratan como criminales,

ya nos lo dijo nuestro abuelito:

son los migrantes… héroes nacionales.

* Compositor, músico e interprete

La Jornada Morelos