Activistas denunciaron que la Secretaría de Salud Morelos se ha negado a brindar servicio a miembros de la comunidad LGBTTTIQ+, por lo que responsabilizaron a las autoridades estatales si pierde la vida por negligencia médica.
En entrevista para La Jornada Morelos, René Bello González, vocero del Colectivo Tribus Urbanas, relató que un compañero de la diversidad sexual y defensor de los derechos humanos, Ignacio, conocido como Nano Borja, desde hace más de una semana tuvo accidente en motocicleta y fue trasladado en estado grave al Hospital Meana de Jojutla; sin embargo, al requerir un especialista maxilofacial para checar las fracturas de cráneo, tenía que ser trasladado al Hospital José G. Parres de Cuernavaca, en donde hasta la fecha le niegan el servicio.
El entrevistado afirmó que el subdirector del hospital ha sido prepotente y “groseramente” dijo a su familia que no había especialista maxilofacial, ya que estaba de vacaciones y lo mejor era que se lo llevaran, pese a al estado grave de salud de Nano.
“Fueron dos ocasiones que el hospital Parres lo regresó. Esta última vez ya había caído en coma. Por su parte, el Hospital Meana de Jojutla le solicitó al Hospital de la CDMX que interviniera, pero es la hora que ningún hospital nos da respuesta. De parte del Hospital Meana no son accesibles, son prepotentes y groseros. Hace unos días uno de seguridad quiso golpear a una familiar”, aseveró.
Por lo que solicitó la intervención de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos, diputados, presidentes municipales, Gobierno del Estado, Fiscalía, senadores de Morelos y diputados federales para que se atienda a la brevedad a Ignacio.
