Estrella Pedroza y Erick Abraján Juárez
La familia de Dulce Gabriela, la mujer que fue víctima de violencia vicaria e institucional, exige a las autoridades de los Estados de Morelos, Estado de México y Ciudad de México una investigación exhaustiva sobre su feminicidio y el infanticidio de su nieto Fernando. Afirmaron que “merecen verdad y justicia” e hicieron un llamado a las autoridades para que les brinden apoyo en la recuperación de la custodia de su nieto Santiago, el primogénito de Dulce, que está en manos de sus agresores.
Yolanda Flores, madre de Dulce Gabriela, recordó que desde el 2022 su hija inició una lucha legal y social para recuperar la guardia y custodia de sus hijos, Fernando y Santiago, quienes le fueron prácticamente arrebatados debido a la resolución emitida en Morelos por el juez Gabriel César Miranda. Esto ocurrió sin que Dulce fuera notificada del inicio de un nuevo juicio, todo esto a pesar de que previamente un juez de la Ciudad de México ya había dictaminado a su favor.
Como resultado de esta decisión errónea, el pequeño Fernando presuntamente fue torturado y asesinado por su padre y madrastra en Celaya, Guanajuato. En respuesta, Dulce emprendió una lucha por justicia para su hijo y por recuperar la custodia de Santiago, su hijo mayor, que tras la tragedia fue resguardado por el DIF de Celaya, aunque posteriormente, un juez otorgó la custodia a la familia paterna.
El 22 de julio pasado, Dulce desapareció sin dejar rastro. La familia informó de inmediato a la Fiscalía de Morelos, la cual emitió una ficha de búsqueda. Cinco días después, su cuerpo sin vida fue localizado en el Estado de México.
“Hoy me presento aquí, no solo con el insoportable dolor por el feminicidio de mi hija Dulce Gabriela Flores González y por el infanticidio de mi nieto Fernando, sino también con la rabia que me provoca tener que manifestarme frente a ustedes para exigir justicia”, declaró Yolanda.
“Es hora de que las autoridades cumplan su deber ¡basta de omisiones y simulaciones! ya que las vidas de mujeres, niñas y niños son lo suficientemente valiosas como para ser protegidas”.
Yolanda enumeró diversas formas de violencia que sufrió Dulce, enfatizando las omisiones por parte de la Fiscalía de Morelos. “A Dulce se le negó la oportunidad de presentar una denuncia por la sustracción de sus hijos en la Fiscalía de Cuautla, donde fue tratada de manera inapropiada”, agregó.
Luego, relató cómo la noticia de la muerte de Fernando llegó a través de una maestra y cómo se descubrió que había sido golpeado y torturado durante meses.
A pesar del riesgo que corre Fernando, “el 5 de julio de 2023, un juez en Celaya resolvió entregar a Santiago al hermano de su papá, lo que lo pone en riesgo porque mi nieto declaró haber sido testigo de cómo mataron a golpes a Fernando, por lo que se encuentra en peligro bajo el cuidado de la familia paterna, quienes afirman que Fernando se autoinfligió los golpes”.
Dulce solo encontró autoridades que no la protegieron
Acompañada por integrantes de colectivos de víctimas de violencia vicaria y feministas, Yolanda afirmó que el Estado es responsable de la muerte de Dulce: “Cuando Dulce cobró fuerzas y emprendió nuevamente la búsqueda de justicia, alzó la voz y se encontró con autoridades que no la protegieron, lo que la llevó a su muerte. A Dulce la mató el Estado”.
Por lo tanto, anunció que continuará la lucha iniciada por su hija y exhortó a las autoridades a realizar una investigación completa y a recuperar la custodia de su nieto.
“Hoy estoy aquí hablando por mi hija y mi nieto, exigiendo justicia por ellos, exigiendo lo que mi hija siempre exigió”, afirmó Yolanda. Luego, hizo un llamado a las autoridades de Morelos, Guanajuato, Estado de México y Ciudad de México para que investiguen la muerte de Dulce y para que Santiago regrese a la familia de su madre, ya que su vida está en grave riesgo.
“Dulce y Fernando merecen verdad y justicia, mientras que Santiago merece vivir feliz y seguro”, concluyó.