ACCIONES IMPOSTERGABLES ANTE LA CRISIS DEL AGUA

 

La crisis del agua es una preocupación que requiere soluciones inmediatas e impostergables. La UNESCO y la FAO proponen algunas acciones globales. Los gobiernos, locales establecen también algunas medidas para la gestión del agua en la agricultura, la industria y el hogar.

En México la Comisión Nacional del Agual (CONAGUA) es el organismo responsable de la gestión y regulación del agua. Este organismo supervisa, planifica, regula y administra el recuso agua en el país.

Los organismos internacionales así como los gobiernos locales prevén y proponen algunas acciones ante la crisis del agua. Estas propuestas se centran en la sustentabilidad, la gestión eficiente y la cooperación entre los pueblos.

Se proponen prácticas sustentables que protejan los ecosistemas acuáticos con la intención de que el recurso agua esté disponible para las futuras generaciones; asimismo se propone la inversión en infraestructura para almacenamiento, distribución y tratamiento del agua.

Un factor primordial, es el uso eficiente del agua tanto en la agricultura como en la industria y en el hogar para lo cual se debe canalizar la inversión en investigación de tecnologías y prácticas de ahorro del agua.

Los organismos internacionales como los locales coinciden en que es necesaria la sensibilización de la población a través de campañas y de la educación sobre la necesidad de cuidar este recurso. Sin este elemento, las acciones para afrontar la crisis del agua tendrían un resultado muy pobre.

También coinciden en integrar la gestión del agua con estrategias de adaptación a las condiciones del cambio climático cuyo impacto es determinante en la disponibilidad de este recurso.

Estas son algunas de las acciones que se proponen para enfrentar la crisis del agua, las cuales se deben poner en marcha desde el nivel global, el regional así como en el local pero también a nivel individual. La suma de las acciones para el ahorro y la gestión del agua de más de 8 mil millones de habitantes del planeta será decisiva para afrontar esta crisis.

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Vale reiterar que la responsabilidad ante esta crisis no solo corresponde a los organismos internacionales y nacionales, esta responsabilidad es de todos y cada uno de los habitantes del planeta.

A nivel Indiviual, podemos participar con acciones tan simples como baños cortos, el uso de los WC eficientes en el uso del agua, regar por la tarde o noche nuestras plantas o jardines y más acciones que mucha gente que me lee ya practican en su cotidianidad.

Me permito compartir con ustedes una experiencia personal: durante la pasada época lluviosa en el condominio donde vivo no llegó el agua por dos semanas y tuvimos que comprar agua en pipas. Me pregunté cómo es posible que tengamos desabasto de agua en plena época de lluvias, no había lógica alguna.

En la calle corrían ríos de agua por las avenidas, de los techos de las casas escurrían miles de litros de agua que inundaban los pequeños jardines, sin embargo, de la llave del sistema de suministro de agua municipal estaba sin agua.

Ante ésto, diseñé un sistema para recolectar el agua de lluvia. La inversión fue de menos de dos mil pesos. Pensé que si esta sencilla medida se lleva a la comunidad a través de una inversión de la comuna, no habría escasez de agua, al menos en época de lluvias.

En muchos estados de la república se han hecho grandes inversiones para la construcción de enormes presas que se usan principalmente para el riego y la industria. En el estado de Morelos aunque hay todo un entramado de barrancas que en época de lluvias se convierten en verdaderos ríos, no tenemos infraestructura para su almacenamiento.

No pude tener información sobre cuanta agua corre por el sistema de barrancas del estado, pero la cantidad de toneladas de agua es enorme, si se pudiera almacenar una pequeña parte de esta agua, los morelenses no tendríamos problema de desabasto de agua para la agricultura, la industria y para los servicios del hogar.

Es necesario e impostergable pensar en inversiones para la construcción de represas a lo largo de los barrancos para almacenar el agua de lluvia. Existe la capacidad técnica para hacerlo, aunque no podemos decir lo mismo de la política. Pensemos en alternativas novedosas antes que el destino nos alcance.