Un músico muy reconocido y excelente maestro de varios instrumentos, en días pasados escribió como deseo para el 2024, mejores salarios para los artistas, lo que podemos entender en honor a la verdad, por mejores pagos, prestaciones, condiciones laborales que no suelen tener y peor aún, que con la pasada pandemia y sus coletazos, llegaron a cero ingresos para la gran mayoría de las y los artistas. Debo agregar lo sucedido con los pagos retardados por el gobierno de Morelos, al gremio artístico, denunciados años atrás sin mejora especial a lo largo del mismo.
Incluso, para la memoria colectiva, recordemos que a principios de este gobierno federal, se dieron movilizaciones importantes del gremio cultural, en reclamo por el pago vía empresas “offshore”, forma ilegal de pago que eludía pagos de impuestos o de prestaciones, precarizando el trabajo cultural. Por suerte que, derivado de acciones de protesta, se ha resuelto eliminar esa vía de pago (con efectos para el gremio en todo el país), si bien, sigue persistiendo una deuda histórica del país para con las y los trabajadores del sector cultural, en materia de tabuladores de pagos y prestaciones, conforme a criterios profesionales.
En los últimos diez años, en Morelos he presenciado al menos 4 subastas de obras de arte, en favor de trabajadores culturales o de sus familias, ante crisis o situaciones especiales y accidentes, que han producido resultados interesantes, más allá del aspecto económico, y haciendo ostensible la solidaridad con quien tiene una urgente necesidad. En todos esos casos, atestigüé el sólido resorte del gremio, su respuesta rápida y cariñosa, comprensiva e incondicional, de pintores, grabadores y escultores, con acompañamiento en ocasiones, de actos musicales o teatrales, en reconocimiento de la causa.
Para el sábado 27 de enero, y durante la semana anterior a esa fecha, amistades de la artista plástica Mafer Rejón, recientemente asesinada (sí, otro feminicidio no aclarado), están organizando una subasta y actos artísticos de acompañamiento a sus familiares y para recabar fondos para ellos. Apenas antier se publicó la convocatoria para donar parcial o totalmente obra plástica y ya varias personas y artistas, se han anotado para donar obra. Estamos muy confiados en que se reúnan al menos unas 50 piezas de variadas técnicas y formatos, de manera que el público en general tenga interesantes y valiosas opciones de compra solidaria. Si usted, lectora o lector, no ha asistido a una subasta de este género, le invitamos cordialmente a asistir, la cita es en la Casona Spencer del centro de Cuernavaca, a partir de las 13 horas del sábado 27. Se divertirá y apoyará con su presencia y ojalá compra, a esta noble causa.
A Mafer Rejón se le reconoce su interés y compromiso social, su ternura y trabajo en pro de las mujeres y colectivos con causas ambientales y feministas. Laboró varios años en la Fundación Comunidad A.C, institución en la que ha sido apreciada y que respalda también esta convocatoria de varias maneras. Sugerimos tanto al gremio artístico como al público en general, difundir ampliamente la convocatoria que circula actualmente, con este propósito benefactor y solidario.