Después de que se hiciera pública la existencia de guardias comunitarias que protegen los cultivos de la delincuencia, especialmente en el municipio de Tlalnepantla, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) se manifestó en contra, argumentando que no es el enfoque adecuado, ya que el gobierno, a través de su fuerza policial, es la única entidad facultada para emplear la fuerza pública.
En entrevista, Víctor Mendoza, presidente de la delegación Morelos de la cámara empresarial, expresó su desacuerdo con esta situación. Sin embargo, también reconoció que los habitantes recurren a estas medidas para proteger su patrimonio, lo que refleja claramente la falta de seguridad proporcionada por las autoridades dentro del territorio morelense.
El entrevistado lamentó que uno de los delitos más prominentes que aún prevalecen contra la Iniciativa Privada en Morelos sea el cobro de cuotas, siendo la región oriente la más afectada por este delito.
“Aunque no puedo proporcionar cifras exactas, una de las principales preocupaciones es el cobro de cuotas, especialmente en pequeños negocios. Tenemos informes de que algunos han tenido que cerrar debido a esta situación; los empresarios han perdido la confianza en denunciar debido al temor a represalias”, señaló.
Considera que todos los problemas de inseguridad en el estado podrían resolverse si se aumentara el salario de los agentes de seguridad. Recordó que, como ejemplo, la Comisión Estatal de Seguridad (CES) tiene asignada una parte muy pequeña del presupuesto, y los agentes de seguridad en Morelos ganan alrededor de 10,500 pesos, mientras que en Yucatán, que es el estado más seguro, reciben 18,000 pesos. Argumentó que “sin salarios justos, es difícil tener buenos policías”.
Foto: Clara Viviana Meza