*Los propios padres son quienes han ido alejando estas tradiciones de sus hijos
Artesanos morelenses lamentaron que ante la creciente ola tecnológica, los tradicionales juguetes de madera poco a poco van perdiendo terreno en el gusto de los consumidores, principalmente entre niños.
Manuel Carrillo Flores, quien trabaja la madera desde hace 52 años y es una herencia familiar, reveló que son los propios padres y madres de familia, quienes no fomentan entre sus hijos e hijas el gusto por la cultura popular.
El entrevistado refirió que ha sido testigo cuando se acercan los menores a preguntar por juguetes tradicionales como trompos, baleros o carros y son sus propios padres quienes los alejan.
“Estos juguetes de madera son de gran tradición, estimulan la creatividad y la imaginación, y lo más importante; no fomentan la violencia. Hoy en día, incluso hay niños que nunca han podido participar de estos juegos. Muchas veces los papás optan por regalarles cosas tecnológicas, incluso juguetes que los incitan a practicar la violencia, y es importante que se eviten celulares y tabletas”, dijo.
Sin embargo, cuando se instalan ferias es cuando sus ingresos aumentan; y es que los juguetes de madera más solicitados son las guitarras, los carritos, los tableros de ajedrez y el corral de toros, principalmente.