Las elecciones estatales en 2024: base del pacto federal y las nuevas corcholatas
(Parte 1)
Las elecciones estatales tienen un papel central en el proceso democrático de la nación; son la reafirmación del pacto federal. Son las elecciones locales en donde la esencia de la democracia es continuamente experimentada. “Dime cómo anda un gobierno estatal y te diré cómo anda la sociedad”, se lo oí a un viejo político que fue cacique en su estado. Y se refería a que si un gobernador era corrupto, todo el mundo andaba en lo mismo; y que cuando ha habido gobernadores trabajadores y responsables, la gente, el pueblo, parece estar más contento, más tranquilo. Al final, en esta hipótesis, los buenos líderes producen mejores sociedades y también viceversa. La vida política estatal, al final del día, es un reflejo del gobernador en turno. De ahí la importancia de las elecciones estatales para la gobernabilidad; es en ese nivel de gobierno donde más se impacta el día a día de la ciudadanía.
Estamos en temporada de precandidaturas, ahora se llaman coordinaciones. Después de las primarias que eligieron a las candidatas presidenciales, solo falta Movimiento Ciudadano. Las siguientes primarias son en las 9 entidades federativas donde habrá elección para renovar las gubernaturas: Chiapas, Ciudad de México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Yucatán y Veracruz. A pesar de que hay muchas diferencias regionales, sin duda, hay tres temas en común que serán muy importantes:
- La selección del género jugará un papel fundamental en la estrategia de los partidos. El tema de la paridad es una realidad y, por lo tanto, el INE tendrá que dar lineamientos al respecto. Lo que se espera es que la autoridad electoral dé libertad a los partidos y/o coaliciones para que decidan sobre el género, pero estos deberán reflejar paridad, es decir, 5 mujeres y 4 hombres o al revés, 5 hombres y 4 mujeres. Algunos estados acataron una resolución de la Sala Superior del Tribunal Electoral Federal y ya legislaron al respecto. Por ejemplo, Veracruz ya determinó que siempre tendrá que ser el género distinto al de su último candidato ganador, por lo tanto, solo MORENA está obligado a llevar mujer en este estado.
- El voto de castigo, tanto al gobierno federal, pero sobre todo a los gobiernos locales, se quiera o no aceptar, empieza a verse. Sobre todo en las ciudades, comienza a haber un voto de castigo a la administración del Presidente López Obrador. Solo así se explica la derrota en varias alcaldías y municipios importantes de la CDMX y el Estado de México en el 2021. Pero, sobre todo, habrá voto de castigo para los gobernadores salientes, como ya lo hubo en las elecciones intermedias. Por ejemplo, la aplastante derrota de la Coalición encabezada por MORENA en Cuernavaca solo tiene un responsable: el desgobierno de Cuauhtémoc Blanco.
- No aparecerá AMLO en las boletas. Contrariamente al voto de castigo, el voto duro del Presidente también existe en gran parte del territorio nacional. El éxito popular de los programas sociales que impulsó, varios de ellos ya son derechos constitucionales, mantiene una base muy alta de lealtad al voto por MORENA. Solo que ahora López Obrador no estará en las boletas y, en estos momentos, es imposible calcular la merma. Todo dependerá de los candidatos que se seleccionen y del éxito de las campañas presidenciales.
Analizaré brevemente a los potenciales candidatos en los distintos estados en esta y en siguientes columnas. Lo haré en estricto orden alfabético. En Chiapas, ante la salida de Zoé Robledo para terminar su tarea en IMSS-Bienestar, aunque también pudiera caber la hipótesis de limpiar el cochinero licitatorio de la institución, el tiempo lo dirá, dejando el camino abierto para solo dos reales contendientes, ambos en el Senado. Por un lado, Eduardo Ramírez, con una buena trayectoria política local y trabajo territorial de base. Ramírez es morenista reciente, ya que dudaba hace 6 años entre ser candidato a gobernador por el Verde o candidato al Senado por MORENA. Por otro lado, está la coordinadora del grupo parlamentario del PES en el Senado, Sasil de León. Con dos años en campaña y una personalidad amable y afable, sin problemas con nadie, y con un gran trabajo desplegado en favor de la candidatura de la Dra. Claudia Sheinbaum, comienza a verse como la gran favorita.
Todavía podría haber tres contendientes más en la contienda: el Diputado Luis Armando Melgar del Partido Verde, quien no oculta sus aspiraciones y cuenta con una sólida formación política y profesional; la candidatura respaldada por Zoé Robledo, sobrina del Presidente, la Diputada Manuela Obrador, que se suma tarde a la carrera con algunas limitaciones por consanguinidad; y Roberto Albores Gleason, quien fue candidato a gobernador por el PRI y recientemente se afilió al PT con la expectativa de estar en la encuesta de la coalición oficialista.
Manuel Velasco jugará un papel fundamental en este proceso de selección, ya que el Partido Verde mantiene una fuerza importante con una estructura política propia. Además, es esencial considerar la sólida estructura territorial del PES en el estado, donde la influencia de la iglesia evangélica es innegable. Por último, aunque el Gobernador Rutilio Escandón no logró o no mostró interés en construir una candidatura propia, podría vetar a algunos candidatos sin duda.
En un estado completamente a favor de AMLO, parece difícil que MORENA y sus aliados sufran una derrota, a menos que uno de los candidatos fuertes decida unirse a la coalición opositora. Sorprendentemente, el Frente Opositor carece de candidatos competitivos en este momento. Podrían considerar a Willy Ochoa del PRI, Paco Rojas o Rubén Zuarth Esquinca del PAN, o la diputada Olga Luz Espinoza del PRD. En tiempos pasados, la experiencia y el currículum de varios de ellos habrían generado respeto por sí mismos, como es el caso de Willy Ochoa. Sin embargo, ninguno de ellos parece estar en una posición favorable en el actual clima electoral. Por lo tanto, es probable que el Frente Amplio espere a conocer al candidato de la coalición oficial y evalúe la posibilidad de reciclar a alguien más.
La preservación de la herencia y las costumbres desempeña un papel clave en las elecciones locales, y en un estado como Chiapas, esto es de suma importancia. Además, las propuestas relacionadas con la gestión de los recursos naturales y la creación de políticas públicas sostenibles jugarán un papel importante en la próxima elección. No tengo duda de que la senadora Sasil de León es la mejor opción en este discurso.
Otro factor que juega a su favor a nivel territorial es la importancia de la cohesión comunitaria para el segmento de votantes cristianos. En este contexto, la posibilidad de contar con una mujer que posee sólidos valores cristianos, un profundo conocimiento de su estado, experiencia en la administración y legislación a nivel local y federal, además de juventud, se convierte en uno de sus mayores activos. Todo está listo para que Chiapas celebre su bicentenario con la primera mujer gobernadora en su historia. Los cristianos creemos y predicamos que cuando “el justo gobierna, el pueblo se alegra”. Estamos a punto de presenciar la alegría de una joven mujer asumiendo el liderazgo máximo en el hermoso e icónico estado de Chiapas.