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A inicios de abril las turbulencias fronterizas en México son bastas. Primero, el Instituto Nacional de Migración (INM) trabaja en la frontera norte para evitar que las personas se encuentren con autoridades migratorias estadounidenses en Ciudad Juárez, doble frontera, para evitar que salgan de México y entren a Estados Unidos. Segundo, la cooperación para la deportación no se detiene por parte del Estado mexicano, firmó convenios con países del sur para deportar y con países del norte para invertir en la región con programas del actual gobierno. Tercero, los mecanismos jurídicos y estructurales brindan impunidad a las autoridades migratorias en todo México, tal es el caso de Francisco Garduño, entre otros.

En primer término, el 3 de abril El Universal publicó una nota sobre una de las actividades consuetudinarias del INM en Ciudad Juárez (Gamboa, 2024), el uso de elementos del INM para evitar la aglomeración de personas migrantes en el bordo con Texas. Se calcula que 200 elementos realizaron operativos para evitar que migrantes se entreguen a la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos. Estos operativos se llevaron a cabo entre la Puerta 36 y 38, algunas personas migrantes fueron trasladadas a un albergue provisional y otras continuaron con su intención de cruzar. Estos operativos disuasorios son comunes en la frontera y cumplen la intención de deportar bajo el pretexto de observar la calidad migratoria de los migrantes en México, algunas veces esto culmina en deportación o retorno a otros Estados de México.

De acuerdo con WOLA los eventos de personas extranjeras en situación migratoria irregular en México aumentaron 218.22% en el primer bimestre del 2024 en comparación con el mismo periodo del 2023 (Rojas, 2024). De acuerdo con la Secretaria de Gobernación durante los dos primeros meses del año 2024 se registraron 239, 948 eventos de detención de migrantes, número que incrementa respecto al 75,401 del mismo periodo en 2023.

Una segunda situación, es la cooperación para la deportación y para la promoción de programas sociales propuestos por el actual gobierno. México comenzó a cooperar con Venezuela con el programa Vuelta a la Patria que pretende deportar migrantes venezolanos que estén en México con la asignación de 110 dólares al mes por hasta seis meses. Además, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció las cartas de intención firmadas con Colombia y Ecuador. También, el 4 de abril AMLO en su conferencia matutina solicitó recursos a Estados Unidos para atender las causas de la migración. El mandatario recalcó que no es un chantaje la solicitud a Estados Unidos, se solicitaron 20 mil millones de dólares anuales a la atención de causas de la migración en países de América Latina y el Caribe.

El gobierno mexicano está manejando el tema migratorio desde una lógica que proviene desde las necesidades del Ejecutivo, sobre todo desde la necesidad de promoción de programas sociales y de atraer inversión a la región bajo argumentos de atención a las causas. A cambio, México parece estar haciendo el trabajo de deportar y contener personas migrantes en su territorio.

Finalmente, el INM se encuentra trabajando en puntos de cruce de salida y de entrada estratégicos. Aunado a ello, pareciera que las autoridades tienen garantizada la impunidad. Por ejemplo, un amparo interrumpe el proceso penal contra Francisco Garduño por el incendio en Ciudad Juárez que mató 40 migrantes (Forbes, 2024). Además, las deportaciones y detenciones en México se siguen denominando “rescates” y son comunes en todo el territorio, sólo el 5 de abril 61 personas fueron “aseguradas” en Veracruz (Sánchez, 2024). Estos son algunos ejemplos de que México es parte del gran aparato de deportación de Estados Unidos.

El año 2024 es permeado por un ambiente electoral en gran parte del mundo, México y Estados Unidos viven estos procesos al rojo vivo. Muchos indicadores apuntan que Donald Trump ganará las elecciones, personaje que dijo que “México pagaría el muro”. En ese tenor el actual gobierno mexicano ya no pone en duda su cooperación con Estados Unidos en materia de deportación, contención y selección migratoria. Algo es cierto, se ha buscado abandonar la lógica de cooperación en el rubro de seguridad, pero se pretende que sea una cooperación bajo lógicas de desarrollo. Sin embargo, en la práctica las estrategias de control fronterizo mexicano continúan y se complejizan.

*Milpaltense, internacionalista, escribiente y migrantólogo.