Jessica Rivera Hamed
Hace casi 20 años, en la facultad de artes en la UAEM, vi el cortometraje animado de Lourdes Villagómez: Síndrome de Línea Blanca. Lourdes era nuestra maestra de animación en stop motion y ese corto recién lo estaba estrenando.
El corto, que dura poco más de 8 minutos, relata la historia de una niña que muere atropellada y, al despertar – según el storyline del corto -, busca su final feliz como las princesas de los cuentos.
Hace unos días, en la búsqueda de proyectos animados para un proceso de investigación que estoy realizando, me encontré nuevamente con ese cortometraje. No había dimensionado la influencia de este proyecto en mi imaginario creativo y mi representación subjetiva del trabajo doméstico.
Y lo escribo hoy justo que vengo saliendo de una charla sobre el papel de las labores de cuidado y la urgente necesidad de revalorizar el trabajo doméstico remunerado y no remunerado. Revalorizar el trabajo doméstico remunerado implica seguridad social y prestaciones para las trabajadoras domésticas, y el no remunerado, remunerarlo. Silvia Federici plantea que el trabajo doméstico y de cuidados es el servicio más esencial que hay en el mundo, es “la reproducción de la vida”. La investigadora del CRIM y ponente de la conferencia de hoy, Sandra Villalobos, propuso dejar atrás la idea del cuidado como un acto de amor y expuso que necesitamos transitar a un régimen de desfamiliarización de los cuidados, es decir, que esa reproducción de la vida no recaiga exclusivamente en la familia (hoy en las mujeres), sino que el Estado, la comunidad y el mercado también se hagan cargo pues se benefician directamente de ese trabajo.
El cortometraje inicia con el siguiente texto en pantalla: “cuando la princesa despertó de su largo sueño, una mágica carroza tirada por blancos caballos la condujo a los brazos de su príncipe, quien la esperaba en el espléndido palacio donde vivieron felices por siempre”. Seguido de ello, la niña, (representada extraordinariamente con por una línea blanca que funciona para una doble analogía) crece, va a la escuela, aprende la historia de Romeo y Julieta, se casa, y se dedica a garantizar la vida de otros: lava, plancha y cocina para otros.
Si bien el movimiento feminista, desde hace más de un siglo, ha planteado la necesidad de deconstruir los roles y estereotipos de género para alcanzar la Igualdad entre hombres y mujeres, es amarga y sorprendente la vigencia del cortometraje de Lourdes realizado en 2003 cuando apenas hoy en México, se empieza a trazar la ruta del Sistema Nacional de Cuidados como política pública frente a la sobreexplotación de mujeres y niñas. Y retomo la pregunta de la Dra. Sandra Villalobos “¿quién cuida a las cuidadoras?”
Según la ministra Olga Sánchez Cordero, en México, por cada 10 matrimonios hay 3 divorcios y 3 de cada 4 hijos de una pareja divorciada no reciben pensión alimenticia. Además, 33 de cada 100 mujeres en México, de entre 15 y 54 años, son madres solteras.
1 Lourdes Villagómez es productora y animadora egresada de la UAM-X y el California Institute of the Arts con más de treinta años de trabajo en audiovisuales y animación.
2 mejor cortometraje de animación / experimental VII Festival Internacional de Escuelas de Cine.
Mejor cortometraje Femina International Women´s Film Festival
