Por Carlos Quintero J.
Las juezas especializadas de juicio oral, Nancy Aguilar Tovar y Gabriela Acosta Ortega, quienes se encontraban adscritas al Juzgado del Único Distrito Judicial con sede en Atlacholoaya, fueron cambiadas de adscripción a los juzgados civiles de Jonacatepec y Tetecala.
Las juzgadoras, reconocidas por su trayectoria como especialistas en el sistema de justicia oral, fueron relevadas en medio de una grave crisis de justicia y la falta de jueces para atender los conflictos en materia penal.
Personal que pidió no revelar su identidad, confirmó el hecho que podría considerarse como violencia laboral, se hizo público el lunes 6 de marzo, a escasos días de que se conmemore el Día Internacional de la Mujer.
Otra fuente consultada habló de que ambas juezas habrían sido castigadas porque se negaron a acatar la línea que ha impuesto el magistrado presidente, Luis Jorge Gamboa.
Gabriela Acosta y Nancy Aguilar se suman a los casos de otros jueces penales, algunos de los cuales han sido cesados como Arturo Ampudia Amaro, Ramón Villanueva Uribe y
María Luisa de Jesús Rodríguez Cadena.
En sus lugares se han nombrado jueces inexpertos en las técnicas de litigación pero afines a los intereses del actual titular del Poder Judicial, opinaron fuentes que pidieron la reserva de sus datos.
En el sentir de algunos abogados, los cambios podrían serbuenos pero afectan a terceros como es el caso de personas víctimas e imputadas que se ven afectadas ya que sus asuntos volverán a ser juzgados por otros jueces.
