Los cambios en la gestión de becas del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencia y Tecnologias introdujeron criterios no académicos y generaron una creciente inestabilidad en la comunidad científica; para este año, se alteró también el sistema de captura de información, con lo que cientos de académicos fueron excluidos del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), denunció Brenda Valderrama Blanco, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y miembro de la Red ProCienciaMx.
La investigadora, una de las afectadas por los cambios, expuso que el SNI, establecido en 1984, había funcionado de manera consistente hasta el año 2020, cuando cambios arbitrarios en los reglamentos generaron perturbaciones significativas al incluir criterios no académicos y generaron diversos inconvenientes. El mayor problema surgió este año, y ha dejado fuera del sistema a cientos de científicos. Aunque se abrió una convocatoria temporal para abordar las fallas, algunos casos, como el suyo, aún no han sido resueltos.
La investigadora manifestó su intención de buscar soluciones a través de los canales institucionales y advirtió que recurrirá a medidas jurídicas si no se logra una satisfacción. Este “es un caso extremo de una situación recurrente de incapacidad para la operación del Consejo y del sistema”, lamentó.
Brenda Valderrama, miembro de la Red ProCienciaMx, criticó la Ley General de Ciencia, conocida como “la ley Buylla”, por lo que es de las promotoras de la derogación de esta ley, actualmente impugnada en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y sujeta a más de 700 amparos colectivos e individuales, pues, asegura, la permanencia de esta ley resulta perjudicial para la comunidad científica, aunque su derogación también plantea desafíos legales y operativos para el consejo. En ambos escenarios, la situación futura es adversa.
Ante esto, ProCienciaMx busca acercarse a las candidatas presidenciales y propone la elaboración de una nueva ley que respete la Constitución y aborde las carencias actuales. La Red también ha estado trabajando en un ejercicio de planeación para establecer medidas paliativas en caso de que se discuta y apruebe una nueva ley. Buscan evitar un vacío legal que afecte negativamente a la comunidad científica.
Valderrama enfatizó la importancia de resolver estos conflictos, ya que la situación actual afecta a miles de investigadores y estudiantes. “Esta situación es muy adversa para los dos mil investigadores en Morelos y para dos mil estudiantes de posgrado. Hemos visto reducidos nuestros ingresos, el dinero para proyectos, dinero para becas, para estancias en el extranjero y todo eso nos afecta” por ser necesario para mantener la creación de conocimientos, apuntó.
ProCienciaMx busca generar soluciones prácticas en medio de un tiempo que se prevé complicado para el sistema científico. La propuesta está sobre la mesa para aquellos dispuestos a tomarla y avanzar en la mejora de las condiciones en el ámbito científico, concluyó.