La política arrastra vicios y políticas patriarcales que deben extirparse para garantizar una vida libre de violencia para las mujeres, advirtió Margarita González Saravia, precandidata de Morena a la gubernatura de Morelos, en entrevista exclusiva con La Jornada Morelos, en la que lamentó el feminicidio de María Fernanda Rejón Medina, Mafer, y los de 299 mujeres más que han perdido la vida en Morelos durante los últimos cinco años, y advirtió que también la falta de condena y acciones contra este crimen desde el gobierno constituye una agresión al género.
González Saravia reconoció la urgencia de acabar con el machismo que aún guía a muchos hombres y mujeres en la política, “las que callan también son cómplices de lo que está pasando”, advirtió al reconocer que es necesaria la participación de las organizaciones constructoras de paz de la sociedad civil, como las colectivas feministas, las iglesias y las escuelas, en un gran proyecto de educación que permita reconstruir la paz desde la familia y la escuela. Pero también acabar con la simulación en mecanismos que, como la Alerta de Violencia de Género se han convertido solamente en una figura política. “Debe haber una estrategia que dé resultados”, exclamó al reconocer que desde la implementación de la AVG en 2015, los feminicidios y la violencia contra las mujeres se ha incrementado en el estado.
Expuso que el feminicidio de Mafer es el clímax del dolor social porque es una tragedia que pega al sector cultural, y evidencia que sigue sin haber coordinación efectiva en las instancias responsables de la seguridad y la impartición y procuración de justicia. “La inseguridad es el tema más sentido de la población, y es lamentable que no se ha resuelto en muchos delitos, como extorsiones, homicidios dolosos, robo de vehículos y feminicidios”.
Hay una mesa de seguridad que no da resultados y para que eso mejore es necesario que el Ejecutivo se ponga al frente de la seguridad, pero también urge cambiar al Fiscal General y a las fiscalías regionales, revisar a los impartidores de justicia porque la corrupción en ellas genera impunidad. También, aseguró, es necesario resolver el déficit de 70% de elementos policíacos en el estado, para lo que hay que dignificar su labor con mejores salarios; hacer labores de inteligencia y establecer una coordinación efectiva entre los municipios y el gobierno del estado; mejorar la prevención del delito; despresurizar las cárceles con una reinserción social efectiva; abatir la falta de sentencias. Y es el Ejecutivo, dijo, quien debe estar al frente de estas tareas, la experiencia dice que cuando eso ocurre se generan buenos resultados.
Reconoció que muchos de los aspirantes a cargos públicos son agresores de mujeres por acción u omisión, y abundó que en esta lista no sólo hay hombres, “porque también las mujeres pueden ser cómplices por callar”, y recordó “nadie tiene justificación para agredir a una mujer y cuando algo así pasa, todos sociedad y política debemos responder”, concluyó.
Foto: La Jornada Morelos