Aunque desde junio del 2023, la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de Morelos (Propaem), clausuró de manera definitiva el tiradero a cielo abierto ubicado en el paraje “El Tezontle”, operado por el Ayuntamiento de Huitzilac, el depósito siguió funcionado con el conocimiento de la Secretaría de Desarrollo Sustentable que el 8 de marzo dio a conocer el combate y extinción de un fuego en el basurero. El nuevo incendio que obligó la suspensión de clases y a la declaratoria de contingencia ambiental en Huitzilac y el norte de Cuernavaca, fue respondido por la Propaem con una nueva clausura definitiva del mismo predio.

El gobierno de Morelos emitió la tarde de ayer el comunicado 17090 en que anuncia la clausura definitiva del tiradero a cielo abierto “debido a que carece de la autorización ambiental correspondiente, no tiene control sobre los residuos sólidos y de manejo especial; además de que las actividades que ahí se desarrollan contravienen la Ley de Residuos Sólidos para el Estado de Morelos, así como la Norma Oficial Mexicana NOM-083-SEMARNAT-2003”.

El comunicado no refiere a la clausura definitiva que aplicó en el 2023 la Propaem en el mismo predio, y por el contrario, informa que “desde febrero del año en curso inspectores de dicho organismo iniciaron el procedimiento correspondiente, el cual, una vez que fue agotado se decidió establecer la medida sancionatoria”.

Advierte que “las autoridades responsables no llevaron a cabo la remediación correspondiente, ni tomaron las medidas necesarias para mitigar el daño ambiental del sitio que se ubica cerca de un afluente de un manto acuífero, dentro del Corredor Biológico Chichinautzin; Área Natural Protegida (ANP) de carácter federal”.

“Por ello, la Propaem procedió en febrero de este año a interponer las denuncias penales correspondientes ante la Fiscalía General de la República (FGR) por el Delito Contra el Ambiente y la Gestión Ambiental; así como ante la Fiscalía General del Estado (FGE), por el Delito contra el Equilibrio Ecológico y la Protección del Ambiente”, refiere el comunicado que advierte “en el tiradero a cielo abierto existe una contaminación que puede desencadenar en daños irreparables, limitando los servicios ambientales que proporciona esta zona del Tezontle, por lo que resulta primordial la remediación del sitio, la cual, consiste en un conjunto de actividades tendientes a la recuperación y restablecimiento de las condiciones que propician la evolución y continuidad de los procesos naturales”.

Y refiere que “la reparación del impacto ambiental no sólo incluye una dimensión económica, sino también actividades de remediación, recuperación o mitigación de las consecuencias causadas por la infracción cometida”.