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Luis Alberto Vázquez Cisneros, representante legal del Obispo Emérito de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, calificó como desatinadas las declaraciones del titular de la Comisión Estatal de Seguridad (CES) Morelos, José Ortiz Guarneros, tras hacer “conjeturas” respecto a su desaparición y posterior localización en el hospital general José G. Parres en Cuernavaca y del gobernador en funciones del Poder Ejecutivo, Samuel Sotelo, quien también se ha pronunciado en el caso y del mismo modo ha “revictimizado” al prelado, sin tener todos los elementos de prueba, por lo que el entrevistado les recordó que su trabajo es la prevención y no la investigación de los casos, ya que de eso se encarga la Fiscalía General del Estado (FGE) Morelos.

Por lo que consideró que los funcionarios están causando daño moral a su representado, pues cabe recordar que desde el Gobierno del Estado Morelos se ha filtrado información en el caso a medios de comunicación cercanos a la administración, tanto de las cámaras de vigilancia como de los reportes médicos que forman parte de una carpeta de investigación, dando a entender que, incluso, el propio Obispo tuvo la culpa, lo que no está comprobado y sólo causa un impacto negativo entre la opinión pública, sin que esté debidamente acreditado, lamentó.

La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) también hizo un llamado “respetuoso” a evitar especulaciones, al referir que como iglesia confía en las instituciones, por lo que deja en manos de las autoridades la investigación correspondiente.

“Por ahora solo pedimos, respetuosamente, que se eviten conjeturas y especulaciones que enrarecen el caso de forma innecesaria, tomando en cuenta la dignidad humana. De momento, su estado de salud es reservado y se están siguiendo las indicaciones médicas. Apenas tenga las condiciones de salud requeridas, el mismo señor Obispo Salvador Rangel rendirá su declaración e informará oportunamente”, informó la CEM.

También, la Cruz Roja Mexicana, delegación Morelos, desmintió a varios medios estatales, al afirmar que mienten en sus reportes noticiosos, ya que sus paramédicos no participaron en el traslado del obispo Salvador Rangel en una de sus unidades, lo que resulta ser una información falsa.

Destacó que la ambulancia número 57, mencionada en las notas periodísticas, efectivamente sí pertenece al nosocomio privado, sin embargo, no fue utilizada por la institución para el traslado de la persona referida.

Abundó que todo está debidamente sustentado de acuerdo con las bitácoras de salida de las ambulancias, ya que no hay ningún registro de atención ni trasladado de ninguna persona con el nombre de Salvador Rangel en la zona a la que se hace referencia.

“Lamentamos cualquier confusión que información falsa haya podido causar”, enfatizó.