“La Fiscalía Anticorrupción está protegiendo a personal de la administración pasada”, aseguró José Luis Urióstegui Salgado, presidente municipal de Cuernavaca, al contrastar la celeridad con que el órgano autónomo ha integrado expedientes contra servidores públicos del ayuntamiento, como policías con la falta de avance en las 32 denuncias que su administración ha presentado contra exfuncionarios municipales.
El alcalde acusó al fiscal, Juan Salazar Núñez: “ha dicho que siguen en estudio y que ya judicializaron algunas, pero ninguna de las que nosotros presentamos”, lamentó. Expuso que si bien por el tipo de delitos que deberían imputarse a los servidores denunciados no hay peligro aún de que las denuncias prescriban, “no es tan corto el plazo de prescripción, pero sí hay ese riesgo y que exista impunidad como existió en el juicio político que presentamos en el Congreso (en contra del exalcalde, Antonio Villalobos Adán)”.
El alcalde exhortó a la Fiscalía: “hace falta que se pongan a trabajar las áreas de investigación del delito”.
Apenas horas antes, la Anticorrupción había dado por concluido el proceso penal en contra del ex subsecretario de Protección Civil del Ayuntamiento de Cuernavaca, Gonzalo Barquín Granados, a quien junto al exalcalde Villalobos y otros dos exservidores públicos del Ayuntamiento, dos empresarios habían acusado por el delito de cohecho. La Fiscalía aseguró que la determinación se tomó debido a que los empresarios ya no mostraron interés por el caso.
Actualmente, el exalcalde se encuentra sujeto a proceso en libertad por el presunto desvío de recursos de trabajadores del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca, pero la denuncia no provino de la actual administración municipal que durante 2022 integró 32 expedientes de presuntas irregularidades cometidas por el exalcalde y otros exfuncionarios municipales en detrimento del patrimonio municipal, de las que ninguna ha sido procesada hasta hora por la Fiscalía Anticorrupción.