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Detonar soluciones por el agua: el decálogo

 

Esta semana se presentó en la CDMX el “Decálogo para detonar soluciones por el agua”, una convocatoria para trabajar en garantizar un país con seguridad hídrica, donde el agua sea un pilar del desarrollo y un factor de equidad social, preservando el medio ambiente.

Algunas de las asociaciones más importantes del país se unieron para redactar este documento y presentarlo a la opinión pública, haciendo un llamado especial a quienes aspiran a ocupar un cargo público en las elecciones del próximo 2 de junio.

La idea es que se comprometan a hacer del agua una prioridad en sus agendas. A implementar políticas y programas que aseguren una gestión sostenible y equitativa del agua, así como el acceso universal al agua y el saneamiento.

Argumentan que tenemos un sistema hídrico bajo gran presión y requiere con urgencia un nuevo enfoque, una gestión del agua que atienda la situación y las realidades actuales del país. Para ello, proponen desarrollar una Estrategia Nacional Hídrica al 2050 que considere los riesgos del cambio climático en México y que asegure la resiliencia social y ambiental, incluyendo, de forma prioritaria, un plan para apoyar a los organismos operadores de agua en cuatro aspectos inmediatos:

Primero, un diagnóstico integral de las capacidades actuales, deficiencias y necesidades, para identificar intervenciones inmediatas que mejoren el acceso y la calidad del agua.

Segundo, la identificación de mejoras operativas y de infraestructura urgentes, que puedan ser realizadas en el corto plazo para aumentar la eficiencia y reducir las pérdidas de agua, asegurando un suministro más confiable y de mayor calidad.

Tercero, la medición del progreso, para garantizar que los compromisos establecidos se lleven a cabo de manera efectiva.

Y cuarto, el fortalecimiento de capacidades mediante programas intensivos de capacitación para todo el personal de los organismos operadores: en la gestión de recursos hídricos, la operación y el mantenimiento de infraestructura, y la atención al cliente.

También proponen como acciones a mediano plazo:

Uno, la implementación de soluciones tecnológicas de vanguardia para la supervisión y gestión del agua, con el objetivo de maximizar la eficiencia en su uso y responder de manera efectiva a las necesidades de los consumidores.

Dos, el desarrollo de programas intensivos de sensibilización dirigidos a la comunidad, enfocados en resaltar la importancia de la conservación del agua y promover prácticas de consumo responsable y de pago del servicio.

Y tres, el diseño de proyectos de infraestructura sostenible, cuidadosamente seleccionados, con el fin de modernizar los sistemas ya existentes, así como ampliar la cobertura de servicio y elevar la calidad del suministro de agua.

Finalmente, como acciones a largo plazo proponen la modernización de políticas públicas y del marco legal, de manera que se fomente la sostenibilidad hídrica, el saneamiento y el acceso universal al agua, así como la resiliencia climática, impulsando soluciones basadas en la naturaleza y de infraestructura verde, así como tecnologías adaptativas.

Los desafíos hídricos sin precedentes que enfrentamos hoy en día: la escasez, la contaminación, los impactos del cambio climático, demandan, de manera critica, una acción colectiva, informada y comprometida. Esta iniciativa busca unir a todos los sectores de la sociedad en torno a una causa común. No es solo un conjunto de principios; es una ruta para formar una visión común del reto y detonar acciones colectivas que guíen a los lideres políticos, las organizaciones, el sector privado y la ciudadanía, hacia un compromiso tangible y efectivo por el futuro hídrico de nuestro país.

*Profesor, consultor y gerente general de AQUATOR