• Buscan abrir agenda de derechos para afrodescendientes en Morelos
Cuernavaca y su zona metropolitana son los principales municipios donde se comete el mayor número de discriminación “racista y clasista”, dio a conocer Isidro Añorve Sánchez, integrante de la comunidad Afromexicana en Morelos.
Acusó que se ha detectado un incremento en las expresiones racistas entre los jóvenes que cursan preparatoria y universidad hacia esta comunidad, principalmente en los municipios de Cuernavaca, Jiutepec, Temixco, Emiliano Zapata y Xochitepec que, paradójicamente concentran a la mayor proporción de población afro, estimada por el INEGI es más de 40 mil personas.
“México es un país racista donde prevalece la pigmentocracia, es decir, que de acuerdo con tu color de piel es la posibilidad que tú tienes para poder tener un buen empleo y un buen salario, y siempre son las personas de tezblanca las que acceden a ellos, un ejemplo claro es que aun en las universidades se sigue perpetuando la discriminación por color de piel y por el tipo de cabello, y son las personas afro las más violentadas”, explicó.
Exhortó a la ciudadanía que en caso de ser víctimas de discriminación racista denuncie ante las autoridades estatales para eliminar este tipo de violencia que sufre un gran número de gente incluso sin saberlo, pues, según Añorve Sánchez, es un fenómeno “silencioso”.
Derechos de afrodescendientes, deuda histórica
Por lado, como parte de las actividades del seminario “Presencia Afrodescendiente en México, una historia de lucha contra el racismo y la discriminación racial”,investigadores de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) sostuvieron que es necesario crear una agenda de la población afrodescendiente que habita en Morelos para que se le garanticen espacios de desarrollo, pues aún existe una deuda histórica con este sector de la población, sobre todo en materia de combate a la discriminación y el racismo.
La académica Fabiola Meléndez, experta en población afrodescendiente, consideró que es necesario revalorar el legado de esta comunidad; es “un legado muy importante que habla de la esclavitud y que hoy también tieneconsecuencias, secuelas, que tienen que ver con el racismo. Abrir una agenda de derechos es abrir todo, con acciones afirmativas y políticas públicas que nos lleven a buscar la equidad, inclusión y aportes de las poblaciones afrodescendientes”, explicó.
Lamentó que en Morelos “estamos en pañales” en cuanto a inclusión, “hay muchas cosas qué hacer. Hay grupos de la asociación civil que impulsan esta agenda, incluso desde la UAEM, pero se queda en un impacto muy reducido”, indicó.