Erick Abraján Juárez
El presidente municipal de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado confirmó que se encuentran en proceso de notificación a un total de 50 familias las cuales corren el riesgo de quedar bajo tierra ante el posible colapso del talud del Panteón de la Paz.
El funcionario municipal explicó que, previo al inicio de la temporada de lluvias, han tratado de hacer conciencia para que la zona pueda ser desalojada lo más pronto posible.
Urisotégui Salgado aseveró que se habilitaron departamentos en la colonia Chipitlán para que las personas que lo deseen, y se sientan en riesgo, se trasladen a esos nuevos espacios, en tanto continúan las labores de evaluación y apuntalamiento de la zona.
“Habilitamos en el poblado de Chipitlán unos departamentos que pudieran ocupar quienes que decidan salirse, algunos ya lo hicieron y se fueron a vivir a otros lugares, pero hay algunos que se resisten todavía. Los riesgos están próximos ante la temporada de lluvia y el reblandecimiento de la tierra que puede provocar nuevos derrumbes poniendo en riesgo la integridad de los vecinos”, agregó.
El alcalde capitalino, dijo que continuarán las revisiones técnicas del Colegio de Ingenieros y las soluciones que plantean requieren inversiones elevadas por hasta 200 millones de pesos, cantidad que “no es factible” de ser cubierta por el Ayuntamiento.
