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Hay tres características esenciales que están determinando nuestro tiempo en el siglo XXI: la incertidumbre, la rapidez y la creatividad. Estos elementos están determinando nuestra manera de comportarnos, de pensar y actuar, veamos el por qué:

La incertidumbre, de acuerdo con el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, la palabra “incertidumbre” puede significar inseguridad, inquietud, desasosiego, indecisión, vacilación, duda, recelo, sospecha e incerteza. Como se pueden percatar todas estas expresiones representan un estado de emoción o ánimo, el cual está alterando nuestra manera de pensar y sentir e interpretar los acontecimientos, desde alguna de estas posiciones construimos nuestra realidad y por esta causa a nuestro cerebro le cuesta mucha energía pensar. Por eso lo más fácil es conducirse en manada, en grupo o como borrego siguiendo al líder que nos guíe, aunque no sabemos a dónde nos lleva, puede ser a un buen lugar donde disfrutemos de nuestra libertad o simplemente, la perdamos y quedemos como súbditos atados a una realidad que no deseamos.

La rapidez, implica celeridad, velocidad, ligereza y prisa, estas expresiones están dirigidas a la acción o el comportamiento del pensar de las personas, es decir, si no actuamos con rapidez, se nos dificulta entender lo que está sucediendo en nuestro entorno, por eso somos presas fáciles de ser engañados o manipulados. En este tiempo pensar es una obligación.

La creatividad, este concepto tiene dos acepciones diferentes, la limitada es simple, pero es la más socorrida por las personas, la de inventar, imaginar y tener ingenio. Estas cualidades, generalmente, se usan para hacer teorías conspirativas, para deformar la realidad o explicar de manera simple lo que no entendemos. La otra acepción tiene que ver con la innovación, imaginación, inspiración, que añada valor a las cosas y hacerlos diferentes. La creatividad bajo este enfoque se usa para tener una mejor vida. Pensar es difícil.

Por ello, este 2 de junio nuestro voto debe ser bien pensado y reflexionado, porque el futuro de nuestra libertad, de nuestro país y del estado de Morelos están en juego. No olvidar, que podemos estar peor.