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Los semáforos ambientales se utilizan de manera diferente en cada ciudad, por ejemplo, en Ciudad de México están “bastante” desarrollados y actualizados, con sistemas de información por red e incluso, aplicaciones, situación que en Morelos no sucede, por lo que ante el incremento de los incendios forestales sería necesario que las autoridades estatales inviertan en esos mecanismos de vigilancia para prevenir, entre otras cosas, enfermedades respiratorias.

Así lo comentó en entrevista para La Jornada Morelos, Horacio Riojas Rodríguez, director de Salud Ambiental en el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), quien sostuvo que “todavía nos falta desarrollar este tipo de sistemas de comunicación” para enviar recomendaciones cuando las concentraciones aumentan por las conflagraciones, o por otras causas.

“Hace falta todavía que las autoridades de salud, de educación, desarrollen esos sistemas de vigilancia. En Guanajuato, por ejemplo, en las escuelas se utilizan unas banderas o unos semáforos para indicarles a los maestros y a los niños cuál es la calidad del aire”, informó.

Señaló que como investigador, en Morelos se han hecho -no necesariamente por los incendios-, estudios sobre la calidad y contaminación del aire y sus efectos en la salud de los niños, sobre todo en los escolares y “tomando en cuenta, por ejemplo, el promedio anual de los contaminantes, no se alcanzan las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud o de la norma nacional”.

Por lo que, en casos como la temporada en que se presentan más incendios, la calidad del aire puede ser muy mala o extremadamente mala como lo llegó a ser el pasado 15 de abril en la zona norte de Cuernavaca, cuando denso humo negro bajó a la capital derivado del incendio forestal en Bosque de Agua, en Huitzilac, que representó un riesgo a la salud y sus efectos agudos.

Recordó que la única estación oficial de monitoreo que existe en Cuernavaca está en el centro, por lo que, “efectivamente, es necesario aumentar el presupuesto para crear más, de tal manera que puedan cubrir una mayor población”.

“Por ejemplo, sería bueno tener una estación en el norte de la ciudad, digamos hacia la zona del poblado de Santa María Ahuacatitlán y, por otro lado, tener otra hacia el sur, por el lado de Jojutla. De hecho, está en el programa de calidad del aire de Morelos pero hace falta el presupuesto para instalarlas y después para estar comunicando permanentemente la calidad del aire”, indicó.

En comparación con otras ciudades, el monitoreo de calidad del aire todavía “no es tan bueno como quisiéramos” y tampoco el sistema de reporte que se le notifica a la población, por lo que esas son cosas que hay que mejorar, ya que eso permitiría generar información en tiempo real que sirva a las personas para protegerse y, en su caso, restringir algunas actividades, sea por incendios o por la contaminación generada por los vehículos.

“Al final, lo que tenemos con estos sistemas de monitoreo y de comunicación es un menor riesgo y una menor cantidad de padecimientos relacionados con la mala calidad del aire. Llamamos a la población a que esté pendiente de lo que nosotros llamamos el Índice de Calidad del Aire y Salud, ya que derivado de los incendios en estos momentos la calidad del aire es mala en Huitzilac y Tepoztlán y digamos en la zona sur la calidad del aire ha mejorado, todavía no están en verde, están en amarillo, y el naranja en la parte centro y en la parte norte y la tendencia es a la mejora, eso quiere decir que tal vez se están controlando los incendios o el viento está ayudando entonces parece que la crisis va pasando”, puntualizó.

 

Foto: X @ SEMADET Jalisco