Tania Nava
Y ahora que recibimos este nuevo año 2024, por cierto, un enorme abrazo a todas, todos y todes nuestr@s lectores de la Jornada Morelos, que tengan un excelente inicio de año…Toda la población LGBTTTIQAP+ a nivel mundial nos quedamos en shock, ya que nos enteramos, de que ya podremos recibir la bendición de los sacerdotes católicos, todo esto por órdenes del Papa Francisco ¿será este un gran avance para nosotros con la iglesia católica romana?, ¿pero es nada más la bendición? ¡no vayan a pensar que ya nos podemos casar por la iglesia! ya que quedo claro en las palabras textuales del Papa Francisco, que no podemos formar parte de rituales o liturgias, eso para nada, y con esto ¿estará afirmando el Papa lo que dijo Jesucristo? “el que esté libre de pecado que arroje la primera piedra”, ¿reconoce el Papa Francisco que entonces todos somos pecadores? y no solo las personas de la población LGBT+, creo que ya podremos asistir tranquilos a misa…
Como lo he mencionado anteriormente el que seas una persona de la población LGBTTTIQAP+ no significa que no creas en Dios, o que no puedas ejercer tu espiritualidad, en lo que tú creas, lo que sí, y se nos hace rarísimo ¿por qué ahora se arrepiente la Iglesia Católica, de todo lo que han dicho sobre las personas LGBT+?, el Papa Francisco aprobó un documento doctrinal, en donde autoriza la bendición de las parejas del mismo sexo, pero prohibido imitar algo que asemeje al rito de matrimonio de las parejas heterosexuales.
Se habla de las bendiciones, cuando alguna persona las solicita, pero de algo estoy segura, muchas personas de la población LGBT+ las hemos recibido sin mencionar que somos parte de la comunidad, seguramente en bautizos, bodas, peregrinaciones, misas o por cualquier otra razón, creo que no nos presentamos ante un sacerdote anteponiéndole que somos parte de la población LGBTTTIQAP+ y más si sabemos que siempre nos hemos enfrentado a la discriminación y no solo en esta religión sino en todas.
Ante todo esto la parte más conservadora de la Iglesia Católica o la más tradicionalista, a nivel mundial, se están comenzando a oponer a realizar dicha práctica, ya que para ellos es un pecado y un delito pertenecer a la población LGBTTTIQAP+, incluso varios cardenales han mencionado que “es una blasfemia”, afirman varios sacerdotes también, que es un comportamiento inmoral el de las personas LGBT+ y que al ser parte de esta comunidad adoramos al diablo y no a Dios, así como cualquier persona que sea infiel por cualquier medio, o que mantenga relaciones sexuales fuera de su matrimonio, serán rechazados inmediatamente por el creador y directo al infierno.
Algunos obispos también se encuentran diciendo que sí, sí nos darán la bendición, pero antes, debemos de abandonar la vida pecaminosa de pertenecer a la población LGBTTTIQAP+, y que de ninguna manera van a bendecir a pecadores, impuros, que no se han arrepentido, y peor aún a los que lleven una vida pecaminosa pública, por esta y muchas cosas más, la población LGBT+ no podemos, ni debemos, bajar la guardia por nuestros derechos humanos, todo esto que se genera en las iglesias católicas, en lugar de ayudar, genera discursos de odio, ¿será tan importante una bendición? O mejor que el Papa Francisco nos ayude a erradicar los crimines de odio en el mundo. Nos leemos la próxima semana…