Hugo Barberi Rico
El servicio comunitario, “tequio”, como se define en náhuatl, fue revivido en la comunidad de Apozonalco, del municipio de Xoxocotla, con la integración de vecinos, miembros de un comité de padres de familia de la primaria del lugar y empleados del ayuntamiento, entre los que se encontraba el presidente municipal, Abraham Salazar Ángel.
Se organizaron para que en menos de tres horas habilitaran una calle que usa el plantel educativo y un atajo a dos calles de la misma colonia, las cuales habían permanecido marginadas por décadas.
“Se trata de que todos pongamos un granito de arena, pongamos de nuestra parte para dar un beneficio que es para todos”, señaló en su mensaje Salazar Hernández, “no se pierde nada, necesitamos de todos, se siente rico venir y ayudar, no sé ustedes, pero a mí así me pasa, estando nomás en la casa no gana uno nada, se viene uno a desestresar y la llevamos bien”, comentó.
“Esto ya lo venían manejando nuestros antepasados, antes de que llegaran los españoles, pero era un trabajo, un servicio personal para la comunidad, gratuito”, reforzó en un comentario a los asistentes el cronista municipal, Armando Valencia Ríos, en un momento se tomó un receso para hidratarse.
En entrevista, el edil, Abraham Salazar, manifestó que la idea del “tequio” se originó en una reunión con los colonos, por una obra pendiente, “y también nos pidieron de favor que les echáramos la mano entre vecinos y nosotros, porque era un paso intransitable por las ramas de los árboles y maleza y hoy nos dimos cita, dimos un gran avance, limpiamos, emparejamos y quedó muy bonito”.
Explicó que el “tequio” es precisamente una labor conjunta y que la experiencia se repetirá. Anunció que ahora esperan rehabilitar dos campos de futbol y una cancha de basquetbol; se invitará a todo el pueblo para que acuda, principalmente a los deportistas, que se unan todos al trabajo colectivo, “porque solos no podemos avanzar, necesitamos de la genere para poder dar un cambio a nuestro municipio”, concluyó.
