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Madres y padres de familia de Morelos se convirtieron en ayudantes de Melchor, Gaspar y Baltazar, para ayudarles a encontrar los juguetes, juegos, ropa y otros regalos que en miles de cartitas la niñez morelense pidió a los tres Reyes Magos como parte de la tradición con la que concluyen los festejos navideños.

Los recorridos iniciaron desde el principio de la semana, pero este viernes los asistentes de los Reyes Magos repletaron los supermercados, mercados, tianguis, jugueterías y plazas comerciales para conocer precios de los regalos que los niños pidieron en sus cartitas, enviadas por globos al cielo o convenientemente colocadas en forma de rollo dentro de un zapato del infante beneficiario de los obsequios que, si fueron buenos y la economía lo permitió, llegaron en la madrugada de este sábado.

Desde temprano, en el tianguis de Día de Reyes que los semifijos instalaron en las calles del centro de Cuernavaca, cientos de padres de familia, con los deseos de sus niños en la memoria o en pequeñas notas, recorrieron el largo pasillo de la calle Guerrero, flanqueado por exhibiciones de carritos, miniaturas de máquinas de construcción, muñecos, dinosaurios, pelotas, peluches y también, pese a todas las recomendaciones, miniaturas de armas de juguete.

Casi en la entrada del tianguis eran recibidos por un trío de modelos vestidos a la usanza árabe, dos de ellos con enormes barbas falsas que simulaban a los tradicionales reyes de oriente. Aunque no eran la mejor reproducción de Melchor, Gaspar y Baltazar, pese a las ganas que le echaban, sirvieron para que familias y turistas se tomaran fotografías con ellos.

Las reproducciones de personajes de caricaturas infantiles, como Paw Patrol, Blue, la Granja de Zenón, y otros estaban presentes, pero también otros personajes no tan infantiles, como Merlina y hasta Chucky, ese muñeco mal portado de la franquicia de películas de terror.

La mayor parte de los asistentes sólo preguntaban precios y, como buenos ayudantes de los Reyes Magos, los anotaban para comparar con otros sitios porque, aunque el flujo de personas era impresionante en el tianguis, no era el único instalado en la ciudad.

También los mercados municipales y supermercados mostraron una alta afluencia de padres de familia que anotaban en listados para los Reyes Magos gastos de entre trescientos y dos mil pesos en obsequios para los pequeños. Como cada año desde hace más de una década, los juguetes más requeridos fueron, para las niñas, las muñecas, Barbie sigue siendo la más solicitada pero la competencia se ha cerrado con otras miniaturas como Ladybug, la casa de muñecas Gabby’s Dollhouse, la de Wish hecha con bloques de Lego, sirenas y muñecos de peluche. Mientras para los niños, las listas de los más vendidos reportan los carritos miniatura de Hot Wheels (algunos con enormes pistas para hacerlos correr), juegos de bloques de Lego, y personajes miniaturas de las series adaptadas para niños de Star Wars (Grogu es por segundo año consecutivo el favorito de la franquicia) o pequeños dinosaurios de la serie Jurassic Park.

Otras cosas que pidieron los niños de Morelos a los reyes Magos fueron videojuegos, Hogwarths Legacy, Super Mario Bros. Wonder, The Legend of Zelda, Mario Kart 8, y el EA Sports FC 24 fueron de los más pedidos para esta temporada.

El flujo de madres y padres de familia por los pasillos en que se exhiben juguetes en todo Morelos continuó prácticamente todo el día. Los padres avisaron a los Reyes Magos que ya entrada la noche se fueron de compras a los locales que, ya entrada la noche, empezaban a ofrecer ofertas aún mayores a las que habían promocionado durante el día. Luego hicieron, como cada año, su veloz recorrido por las casas de Morelos. Misión cumplida.