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La reestructuración de la Fiscalía General del Estado (FGE), es una de las principales apremiantes en Morelos, a fin de garantizar el acceso a la justicia de los ciudadanos aseguró Margarita González Sarabia, candidata al gobierno estatal por la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, quien se ha comprometido que de ganar las elecciones, el próximo 2 de junio, una de sus principales tareas será la de nombrar a un fiscal “honesto, con experiencia y resultados probados; con quien se pueda crear una fiscalía autónoma pero que haya coordinación con el Ejecutivo y se garantice el acceso a la justicia”, dijo.

Margarita González prometió también una “limpia” en la fiscalía de los llamados “aviadores”, personas que cobran un sueldo sin presentarse a laborar en la institución.

Sobre el déficit de policías que padece la entidad, dijo que va de la mano con la reestructuración de la fiscalía, puesto que es precisamente este órgano el encargado de realizar los exámenes de control y confianza, aun cuando su titular, Uriel Carmona Gándara, no los aprobó, lo que resulta incongruente.

Margarita González, advirtió que ya se analizan algunos perfiles, aunque dijo que por ahora lo importante es ganar la elección.

“Nosotros estamos convencidos del apoyo de los ciudadanos; estamos enfocados en lograr el triunfo el próximo 2 de junio y, por ahora nos toca pedir a los ciudadanos que ejerzan su derecho a votar; que el día de la elección salgan desde las ocho a votar y apoyen el proyecto que trabajará por su bienestar”, enfatizó la candidata morenista.

Nuevamente pidió el voto en “cascada”, es decir por todos los candidatos de la coalición que encabeza el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), para que exista una mayor representación en el congreso local, federal, senado, alcaldías y la presidencia de México, pues aseguró que “así se concretará la construcción del segundo piso de la cuarta transformación”.

La intención de remover al fiscal Uriel Carmona, fue planteada por la candidata a la presidencia de México, Claudia Sheinbaum, después del caso de Ariadna Fernanda López.

Este caso llevó a la detención de Carmona Gándara, quien permaneció por 45 días recluido en penales de la Ciudad de México y el Estado de México, para posteriormente salir en libertad condicional; en los últimos días, un tribunal del Poder Judicial determinó sobreseer el caso, asegurando que no había culpabilidad del fiscal en el delito de obstrucción de la justicia.