Un movimiento social por la transformación cultural
Cultura 33+3 es un movimiento social en defensa de los derechos culturales de la población. En la basta complejidad política y vida cultural del país, es difícil encontrar un caso similar de lucha, resistencia y persistencia. Desde hace doce años, agentes culturales de todo el estado de Morelos se han dado a la tarea de colocar en la agenda pública la pertinencia de que el Estado y el Municipio reconozcan y asuman el inalienable derecho de las comunidades de participar en el diseño de las políticas que deriven de un verdadero y legítimo proyecto cultural, orientado al desarrollo de las personas.
La Ley de Cultura y Derechos Culturales para el Estado de Morelos es un triunfo sin igual por parte de movimiento social alguno. Por ello, el próximo proyecto cultural de Estado habrá de reconocer esa lucha que es una vanguardia en materia de exigibilidad y progresividad de los derechos culturales en México. Sería muy lamentable que el próximo gobierno se base únicamente en el proyecto de nación y sus paradigmas ideológico y administrativos de gestión cultural (díganse Milpa, Jolgorios, semilleros creativos, Pilares y Utopías), sin atender las particularidades de la región cultural suriana cuya tradición milenaria se refleja en los diversos procesos socioculturales que han forjado una identidad en la diversidad de fuerte fundamento indígena y afrodescendiente. Somos una región que se debe y merece un proyecto cultural propio, descentralizado y descolonizado. La población y el tiempo nos lo exigen.
La Declaración de Tepoztlán, la Ley de Cultura y Derechos Culturales, así como diversos pronunciamientos constituyen un legado que se ha propuesto amplificar la voz de pueblos y comunidades, sus exigencias y demandas en defensa de su dignidad. Reconocemos que somos una tradición que germina desde una impronta, la de la revolución cultural de los pueblos surianos. La cultura -lo repetiremos siempre-, es el punto de partida y de llegada de la construcción del ser humano, y en esta construcción fundamenta sus estructuras sociales, políticas, económicas y su manera de relacionarse con el mundo. Es decir, es el motor de una sociedad.
Quienes participamos del proceso de integración de Cultura 33+3 provenimos de todos los municipios de la entidad, pero sobre todo de una generación de promotores y gestoras vinculades a diversos movimientos en defensa del agua, del territorio, de la exigencia de democratización, y del reconocimiento de los derechos de las mujeres, y de la diversidad sexual, de la izquierda social y partidista o institucional, fundadores o simpatizantes del otrora histórico PRD y de Morena.
Somos un colectivo horizontal, autogestivo, abierto e incluyente, crítico, que ha atravesado diversas experiencias de crisis y autocrítica en su interior, de desgaste y reflexión, que ha privilegiado el interés público como un motor de continuidad para exigir que el Estado cumpla con su obligación de garantizar el respeto de los derechos culturales de la población a través del acceso a bienes y servicios en materia de cultura.
Desde diversas disciplinas y desde la lucha y el compromiso social, hemos colaborado a través de instituciones culturales, académicas y científicas para modelar no uno, sino diversos proyectos para el desarrollo cultural de las comunidades. Hemos sido actores, protagonistas y agentes de cambio. Nuestra agencia ha sido desde la probidad y autoridad moral e intelectual. No somos pretensiosos arribistas que amanecieron al compromiso social.
Nunca hemos callamos ante los abusos de los regímenes autoritarios, de la derecha del panismo en Morelos, de la corrupción del perredismo y del neoliberalismo impulsado desde la concertacesión y los pactos de impunidad del régimen político estatal y nacional, de los que Morelos ha sido víctima desde la Revolución hasta nuestros días, pues como sabemos, las cúpulas políticas y empresariales siguen decidiendo los destinos políticos de Morelos.
Sí, en Cultura 33+3 creemos en la transformación por la vía política, por eso en noviembre de 2023 saludamos la designación de Margarita González Saravia como Coordinadora de los Comités de Defensa de la 4T en Morelos. Hay una interlocución honesta que advertimos promisoria. Ya esperamos el encuentro para un diálogo abierto y propositivo con la comunidad cultural.
Vemos el futuro como la promesa donde todo cabe, más allá de las coyunturas políticas, y de las hordas de oportunistas. No desistiremos, desde el centro y/o la periferia, sin asumirnos marginales ni parias. Sabemos que la respuesta para una verdadera vida democrática no solo está en los partidos políticos, está auténticamente constituida desde la sociedad activa, proactiva y creativa, por lo tanto, efectiva, de la que siempre seguiremos formando parte. Porque lo hemos vivido, pensamos, creemos y sabemos que, si no es cultural y colectiva, no será transformación.