A un año de asumir el cargo como titular, Adriana Pineda Fernández, magistrada presidenta del Tribunal Unitario de Justicia Penal para Adolescentes del estado de Morelos (TUJPA), reconoció que aún persisten pendientes y rezagos en la institución, y se comprometió a trabajar para fortalecerla.
Destacó que entre los pendientes se encuentran la capacitación de los cuerpos policiales de Morelos en relación con la detención de menores, así como la elaboración de un protocolo que permita a los uniformados llevar a cabo detenciones de adolescentes respetando sus derechos, dado que se han registrado violaciones a los Derechos Humanos en este contexto.
“Es fundamental reforzar el conocimiento sobre las garantías de las niñas, niños y adolescentes, tanto víctimas como imputados, dentro del Sistema de Justicia Penal”, señaló Pineda Fernández.
Además, la magistrada resaltó que uno de los desafíos más importantes es asegurar el cumplimiento de las medidas sancionadoras. Sin embargo, este proceso se ha visto afectado debido al cierre de la Casa de Medio Camino, que proporcionaba servicios post penales a adolescentes y adultos jóvenes.
“Este sistema es holístico y no punitivo, y busca el desarrollo integral de los adolescentes. Por lo tanto, debemos fortalecer todos los planes para el cumplimiento de medidas sancionadoras, para que los jóvenes identifiquen cuáles fueron sus derechos violados y cómo pueden restituirlos, proporcionándoles las herramientas necesarias para evitar la reincidencia delictiva”, explicó Pineda Fernández.
La magistrada también destacó la necesidad de contar con una Fiscalía Especializada en este tema, ya que el sistema para adolescentes es diferente al de la Fiscalía General del Estado (FGE) que aborda casos de adultos, por lo que cada apartado del sistema para adolescentes “tiene por delante bastantes retos que cumplir”.