Hugo Barberi Rico
Eugenia González Castrejón, la mujer que, según sus vecinos de la comunidad de Coaxitlan, municipio de Tlaquiltenango, fue raptada de su propia casa la mañana del miércoles pasado por un grupo de habitantes de la comunidad de San Juan Teocalcingo, municipio de Atenango del Río, Guerrero, regresó a su domicilio ayer.
Vecinos consultados confirmaron que desde ayer temprano lograron verla en su domicilio, pero la familia ha mantenido silencio sobre el incidente, “pues comentan que sí la lastimaron donde la tuvieron detenida”, informó un vecino entrevistado por La Jornada Morelos.
Como se recordará, alrededor de las 11:00 horas del pasado miércoles, de acuerdo con la versión proporcionada por los mismos pobladores del lugar, María Eugenia fue raptada de su domicilio en la avenida Morelos de la comunidad de Coaxitlan, municipio de Tlaquiltenango, Morelos. Este lugar se encuentra enclavado en el sur de la entidad, donde limita con el estado de Guerrero, precisamente con la mencionada comunidad, con la que han tenido problemas limítrofes durante años, situación que vinculan con el presunto rapto.
Cabe informar que los mismos vecinos que alertaron a las autoridades indicaron que en la presunta privación ilegal de la libertad participó la policía municipal de Atenango del Río, Guerrero, quienes supuestamente llegaron hasta su vivienda acompañados por un grupo de personas identificadas como habitantes de la comunidad de San Juan Teocalcingo, del mencionado municipio, en dos patrullas. “Parece que tuvieron una discusión con la vecina y se escucharon varios disparos, luego se la llevaron”, comentaron.
Tanto la familia como las autoridades mantienen hermetismo sobre el caso. A pesar de que se montó un operativo afuera de la vivienda de María Eugenia, donde se encontraron indicios balísticos y con la presencia de la Guardia Nacional y la policía, así como un helicóptero, no se emitió ningún comunicado con información al respecto.