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(Nuestra raíz)

Manuel P. Gómez Vázquez

(Mixcóatl Mikistónal)*

Panolti (Hola). Soy Mixcóatl Mikistónal, mi nombre sembrado en tradición prehispánica significa “Serpiente de nubes”, que alegóricamente es el “Universo infinito” y “energía que todo lo transforma”. Así fui nombrado por el Tonalámatl, que es el libro del destino para nuestras antiguas culturas. Y es que, a diferencia de nuestros tiempos, los nombres que nos ponían no eran por gusto o capricho, o porque así se llamaba el abuelo o el padre, como se acostumbra en la actualidad, sino que buscaban un suceso, alguna señal de la naturaleza o algún vaticinio que se manifestara el día de nuestro nacimiento, con lo cual quedaba marcado nuestro objetivo, por el cual venimos a esta vida. Quiero también destacar, que con enorme orgullo de los orígenes de mi raza, represento al Gobierno Superior Indígena y Pluricultural.

Ha sido una verdadera oportunidad la que nos ha brindado éste importantísimo medio, representado tan dignamente por el señor Enrique Balp, al concedernos este espacio, para poder hablar de nuestras culturas, tradiciones, historias, leyendas, formas, usos, costumbres, lugares, comidas, festividades, lenguas, personas, medicinas, cosmovisión, filosofías y formas de ver la vida de nuestros pueblos originarios; éste será pues, un vínculo de comunicación y expresión de nuestras comunidades y un enlace de acercamiento, en la permanente intención de hermanarnos.

Cuando nos dieron esta insuperable sorpresa, nos emocionamos tanto, que inmediatamente nos dimos a la tarea primero de buscarle un nombre adecuado, pensamos muchos, sin embargo optamos por el más sencillo y acorde: TO (Nuestra) NELHUAYO (Raíz), pero también se puede interpretar como: nuestro principio, nuestro comienzo o nuestro linaje. Así que decidimos iniciar esta maravillosa etapa, presentándonos primero: somos un Gobierno Indígena de tradición, la voz de las comunidades originarias de nuestro bello estado de Morelos; aquí cada semana, les vamos a compartir mucha de nuestra cultura y de nuestra cosmovisión, es decir, la forma en cómo vemos la vida, el respeto por la naturaleza, el amor por nuestra madre tierra, nuestros orígenes, nuestro concepto espiritual, la relación equilibrada entre el yo interior con el universo, los principios de nuestra educación, entre otras cosas. Quizá veamos un contraste con lo que actualmente conocemos, pero estoy seguro de que al adentrarnos más en estos profundos conocimientos milenarios, se nos va a despertar esa esencia que tenemos en nuestro ADN, porque lo llevamos en nuestra sangre, somos orgullosos

descendientes de esas dos grandes culturas: la Anahuaca y la Europea, por eso nos apasiona tanto nuestra mexicanidad, aunque muchas veces no sabemos ni porqué.

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La verdad es que somos muy afortunados de haber nacido mexicanos, porque somos descendientes de esas culturas ancestrales que cada día maravillan más al mundo entero. Por eso los extranjeros que tienen la fortuna de conocer nuestra tierra, (empezando por Hernán Cortés), quedan prendidamente enamorados de ella, aquí es otro mundo, otra forma, otro espacio y otro tiempo.

YENCUIC XIHUITL MATLATHE IUAN OME TÉCPATL

(Inicia el Nuevo ciclo 12 Tecpatl)

Por cierto hablando del tiempo, éste es el año “Matlactlihuan ome técpatl”, es decir: doce pedernal. De acuerdo a lo que dice nuestro Xihuitl powalli (nuestro conteo del tiempo, lo que ahora conocemos como calendario), “Ipan inin kawitl moixutia, motehteke, mokewpa in tlasolle tlin ye amo totechneke”, (“en este tiempo se cuida, se corta y se convierte en tlazole, todo lo que ya no queremos”). Según la cosmovisión de nuestros antepasados, se nos presenta una oportunidad única para reflexionar sobre el ciclo continuo de la vida y la muerte, así como saber nuestra responsabilidad como seres humanos y seres vivos en este proceso; se nos insta a enfrentar los desafíos con determinación y valentía, dispuestos a cortar con lo viejo, para dar un paso a lo nuevo: RENOVAR tal como Tlazohteotl nos enseña. Se nos recomienda enfrentar los desafíos con sabiduría, dispuestos a cortar con aquello que ya no nos sirve y aceptar la transformación que ocurra alrededor de nuestras vidas de manera positiva, aceptando que la naturaleza tendrá la última palabra. Es un buen tiempo para cultivar la introspección y renovación personal, así también como para contribuir al bienestar colectivo y al equilibrio de nuestro entorno.

Es probable que este año, para muchos sea uno de esos años no esperados o no deseados, incluso no hay que asustarse si llegan a ocurrir algunas catástrofes; este es un año en el que regularmente hay movimientos, sacudidas y cambios inesperados, pero tienes que saber que todo lo que ocurra este año es necesario, debemos concientizar que este año es guiado por Tezcatlipoca, por ello puedes traer contigo la energía y el conocimiento que le representa, con algunos objetos como obsidianas, cuchillos o espejos, esto ayudará a que todo en tu casa se equilibre y esté a la disposición del año Técpatl. No te asustes ni desesperes, este año lo necesitamos todos y al final de él, vamos a ver qué realmente tenemos y lo qué nos hacía falta.

Señorío de Cuauhnáhuac, hoy Cuernavaca Morelos.

*Gobernador Superior Indígena y pluricultural