De acuerdo con las cifras oficiales de la Secretaría de Salud Morelos (SSM), los contagios de influenza continúan en aumento, y los decesos, aunque en las últimas dos semanas se han mantenido, sí registraron un incremento entre el corte del 11 de abril y 15 de abril a la fecha, en que se registraron 9 y 11 casos nuevos respectivamente, sin que haya cambios hasta este día.
Al corte de este 23 de abril, la entidad registra 143 contagios y un avance de vacunación sectorial del 87.5 por ciento, lo que representa 569 mil 285 dosis aplicadas; mientras que, SSM registra el 88.1 por ciento de avance, es decir 370 mil 588 biológicos.
Con respecto al panorama epidemiológico del 15 de abril, se registraron 138 casos y un avance de inoculación del 86.9 por ciento, lo que representó 565 mil 485 dosis aplicadas; mientras que, SSM registró el 87.3 por ciento de avance, es decir 323 mil 360 vacunas.
Para el 11 de abril, se registraron 126 casos de influenza y un avance de vacunación sectorial del 85.8 por ciento, lo que representó 558 mil 041 dosis aplicadas; mientras que, SSM registró el 86.2 por ciento de avance, es decir 319 mil 412 vacunas.
Ante este aumento, aunque paulatino, las autoridades conminaron a la población a acudir a su centro de salud más cercano, ya que la vacunación va avanzando poco a poco, extremando precauciones con menores de edad, mujeres embrazadas, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas, así como vigilar a quienes lleven un tratamiento médico, ya que si bien, se registran altas temperaturas en la entidad, es prioritario tomar las medidas preventivas.
Los signos más frecuentes son fiebre mayor a los 38 grados; dolor de cabeza, garganta, muscular y de articulaciones; malestar general, debilidad en el cuerpo, tos, escurrimiento nasal y ojos irritados.
Indicaron que los principales datos de alarma en las y los niños son respiración acelerada, dolor de pecho, dolor muscular intenso, deshidratación, convulsiones y fiebre superior a 39 grados de difícil control.
Recomendaron de manera general realizar ejercicio acorde a la edad; poner en práctica actividades recreativas como caminar o leer; dormir al menos ocho horas; evitar consumo de bebidas azucaradas e ingerir agua simple y potable. Además, lavarse las manos con agua y jabón, o sustituir por alcohol gel al 70 por ciento; y en caso de enfermedad respiratoria, evitar las aglomeraciones y utilizar cubrebocas.