El pasado lunes por la tarde fue hallado en el interior de un vehículo, un cadáver en la calle “Seleccionado”, de la comunidad de “El Coco”, municipio de Puente de Ixtla. El cuerpo del hombre fue levantado en calidad de desconocido. De acuerdo con los datos obtenidos el cuerpo de la víctima presentaba impactos de arma de fuego en el cuerpo.
Se informó que la víctima viajaba en un vehículo de la marca Volkswagen, color rojo, con placas de Morelos, cuando otro coche, marca Nissan, modelo Tsuru, color blanco, le cerró el paso y cuyos ocupantes le dispararon.
Cuando llegaron paramédicos y oficiales a ver lo que sucedía, encontraron a la víctima sin vida.
Para la mañana del martes se registró otro asesinato, esta vez en Tlatenchi, municipio de Jojutla, a más de 20 kilómetros del primer caso.
Se trata de un hombre que fue levantado por las autoridades con huellas de violencia, cuyo cuerpo fue arrojado en un camino de terracería rumbo a una mina.
Por otro lado, alrededor de las 18 horas, se llamó a los paramédicos del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) de Puente de Ixtla, por una persona herida en el centro del municipio. Al llegar les informaron que se trató de una riña familiar, donde la víctima, una joven de nombre Heidi, manifestó haber sido golpeada por su propio hermano en cabeza y rostro, luego de una discusión con él, por lo que le aplicaron los primeros auxilios y la trasladaron a un hospital.
Alrededor de las 21:00 horas del lunes pasado se desató una trifulca entre dos familias en plena calle Benito Juárez, junto a la Unidad Deportiva “Quetzalcóatl”; el enfrentamiento dejó a varias personas descalabradas y golpeadas. El hecho, causó alarma entre los vecinos del centro xoxocolteco, sobre todo especulaciones en redes sociales porque hubo balazos, pedradas y un enfrentamiento grupal.
Fue una riña de aproximadamente 30 personas, confirmaron autoridades, entre hombres y mujeres de las familias identificadas como Rivera y González, protagonistas del enfrentamiento.
Fuentes en el lugar dieron a conocer que se liaron a golpes, hubo pedradas y en consecuencia personas descalabradas, uno sacó un arma de fuego y disparó al aire para disuadir a los oponentes, pero los otros sacaron escopetas e hicieron lo mismo, sin embargo, la trifulca continuó hasta que llegaron los elementos de la policía municipal; algunos de los involucrados corrieron a sus casas, pero dos decidieron entregarse como los que iniciaron la gresca, sin embargo, no hubo quien levantara cargos en su contra.
Aunque hubo personas heridas por las pedradas en la cabeza y en el cuerpo, rechazaron ser atendidas por la ambulancia municipal.