El Instituto de Cultura de Cuernavaca renombró la sala Arcos del Museo de la Ciudad en homenaje a Rafael Cauduro, el pintor y muralista mexicano.
Rafael Cauduro fue el último gran muralista del país que tuvo reconocimiento mundial. Desde su primera exposición en la Casa del Lago en 1976, la obra de Cauduro se convirtió en una corriente en sí misma, en la que a través de sus trazos y formas revela y critica la injusticia y la discapacidad en todas sus formas.
La obra de Cauduro crea texturas con materiales no ortodoxos, adquiridos fuera de las tiendas de arte. Un trozo de muro, láminas, pigmentos burdos, ácidos, el artista mismo decía que se trataba de averiguar el desgaste y “ver qué tortura le podemos hacer a la materia”. La obra de Cauduro tiene entonces un carácter y dureza que se combina con la belleza de la forma, del trazo del cuerpo que dominó con maestría.
En el museo de la Ciudad de Cuernavaca, ciudad que Cauduro habitó por décadas, un acto con la presencia de Ileana Pérez Cano, esposa del artista, así como de sus hijas Juliana y Helena, sirvió para que a nombre de la ciudad, el presidente municipal de Cuernavaca agradeciera que la familia de Rafael Cauduro haya accedido a que el museo dedique un lugar para que visitantes locales, nacionales y extranjeros, conozcan una parte de la gran obra del muralista y pintor que se distinguía por su humanismo, su interés por la justicia social y la dignidad.
El alcalde capitalino destacó el rescate del Museo de la Ciudad para que convertirse en el recinto por excelencia para descubrir las obras de grandes artistas que radican en Cuernavaca, como es el caso de Rafael Cauduro que por más de 40 años decidió asentarse en la ciudad desde donde se inspiró para plasmar trabajos que son de reconocimiento en todo el mundo mezclando lo cotidiano con los esotérico.
Ileana Pérez Cano, agradeció el cobijo del Gobierno Municipal para homenajear a Cauduro quien resaltó, fue en su casa taller de Cuernavaca donde realizó muchas de sus obras conocidas en México y en otros países, tomando como musas a sus hijas y esposa, así como lo que ocurría en su entorno. Y recordó el impulso que el pintor dio a la apertura de más espacios para creadores, como la Facultad de Artes de la UAEM y el fortalecimiento de La Tallera de Siqueiros.
A la inauguración de la Sala Rafael Cauduro ubicada en el Salón Arcos del primer Piso del Museo de la Ciudad de Cuernavaca, asistieron como invitados integrantes del Consejo de la Cultura y las Artes de Cuernavaca que encabeza Cecile Camil, así como artistas como la escultora Miriam Pérez, Jorge Cazarez Clement, fotógrafo e hijo del muralista y pintor Jorge Cazares, escritores, cronistas, escritores, curadores de arte, la titular de la Secretaría de Desarrollo Humano y Participación Social, el director del Instituto de Cultura de la Ciudad y el director del Museo de la Ciudad de Cuernavaca.
Imagen: Cauduro.com