Hugo Barberi Rico
Tras la irrupción de personas ajenas a la escuela secundaria “Enrique González Aparicio” de Zacatepec, presuntamente con la intención de amenazar a los niños de un grupo, los padres de familia se reunieron esta mañana para exigir a la dirección del plantel mayor seguridad en la institución educativa.
Desde las 7:00 a.m., aproximadamente 30 padres de familia se congregaron en la explanada de la ex “Cancha del Ingenio”, ubicada detrás de la entrada principal de la escuela, con el propósito de organizarse y entablar un diálogo con el director de la escuela, Claudio Reynoso Martínez y con la supervisora escolar, Natividad Díaz de León.
Explicaron a este medio que, debido a los comentarios de sus hijos, quienes regresaron a sus hogares temerosos y nerviosos el pasado jueves, la madre de una de sus compañeras irrumpió en su salón, acompañada de familiares, acusando a todo el grupo de realizar “bullying”.
Las amenazas al grupo molestaron a los padres de familiaquienes ahora demandan la expulsión de la niña y solicitar mayores garantías de seguridad en la escuela pues, según los entrevistados, las autoridades del plantel permitieron el ingreso de las personas que amenazaron e intimidaron a todos los alumnos del salón de segundo grado.
Evelia Ábrego Torres, madre de familia, informó que su hija fue amenazada de manera directa y que incluso una profesora del plantel tuvo que acompañarla de regreso a casa después de clases.
“Me siento muy mal por cómo llegó mi hija ayer de la escuela, muy asustada y llorando. Yo también me siento amenazada, como si algo malo pudiera pasarle a mi hija, y la verdad es que esta situación no es vida. Me gustaría que se encuentre una solución”, comentó la madre de familia.
Añadió que, según los comentarios de su hija, su compañera de salón le advirtió que su familia vendría a golpearla, y cuando llegaron, la llamaban para que saliera. Estos hechos ocurrieron alrededor de las 1:00 p.m. y fueron presenciados por varios testigos.
Juan David Cornelio Montoya, padre de familia de un alumno del mismo salón, afirmó que su hijo ya ha sido amenazado en tres ocasiones. Ubicó directamente a la niña que se queja de “bullying”, quien “tiene un grupo externo que amenaza a varios niños, incluyendo a mi hijo. La última vez me tocó a mí, en mi casa, una mañana, cuando llamaron al número de mi esposa y me exigieron que pusiera a mi hijo al teléfono para que revelara los nombres de los acosadores de la niña”.
Eva Rojas Granados, madre de familia del mismo grupo, expresó su preocupación “porque ahora personas ajenas están ingresando a la escuela. No hay seguridad y estamos aquí para exigir que saquen a la niña del grupo y que garanticen la seguridad, ya que no confiamos en dejar a nuestros hijos aquí”.
Durante la reunión, los padres de familia acordaron que, mientras la alumna en el centro del conflicto permanezca en la escuela, no enviarán a sus hijos a clases. Sin embargo, se informó que la dirección accedió a cambiarla de grupo. Otro de los acuerdos alcanzados fue la vigilancia en la entrada de la escuela, permitiendo únicamente el acceso a los padres de familia y estableciendo que, a partir del próximo lunes, será obligatorio contar con un “gafete” para ingresar al plantel.